Apantallan con seguridad privada

 

Para la CNSP contratar escoltas es más cuestión de moda que de protección


Apantallan con seguridad privada

Ante la inseguridad que se vive en México se registró una proliferación de empresas privadas dedicadas a brindar seguridad.

Las compañías ofrecen servicios que van desde vehículos blindados, equipos de monitoreo y personal.

Pero muchas operan afuera del marco legal.

La Asociación Mexicana de Empresas de Seguridad Privada (AMESP), estima que en el mercado hay casi ocho mil empresas de seguridad privada, donde la mayoría están en condiciones irregulares en materia de impuestos, seguridad social, y capacitación de su personal.

De acuerdo a Samuel Cacho de la Teja, representante del Consejo de Nacional de Seguridad Privada (CNSP), 70 de las empresas de seguridad privada a nivel nacional son irregulares.

“Se calcula que de 70 por ciento de las empresas a nivel nacional, pequeñas o medianas, sólo 30 por ciento de su personal cuentan con los requisitos para trabajar como guardia de seguridad”, explicó.

Peticiones del usuario

Cacho de la Teja detalló que cuando una persona se acerca buscando opciones para mejorar su seguridad se realiza un análisis para determinar el tipo de automóvil y personal que prestará sus servicios.

Además, la empresas informan que el personal de servicio de escoltas está certificado y altamente capacitados.

Asimismo, precisan ser discretos, para no poner en riesgo a la persona que los contrata y no agredir a nadie, a menos de que se esté en una situación de riesgo.

“Ese personal debe ser muy bien evaluado, debe tener un perfil muy especial, porque va arriesgar su vida por defender a una persona, y a la persona que está defendiendo tiene que estar preparada para saberse cuidar también”, señaló.

Además, los clientes deben definir para qué requieren una escolta: Para garantizar su seguridad o sólo para apantallar al auditorio.

Según Cacho de la Teja, los usuarios son , en parte, los responsables de la proliferación de las empresas de seguridad privada “patito”, pues no exigen los más altos estándares para garantizar su seguridad.

“El problema es el usuario… qué es lo que quiere… Llegar a un restaurante con dos coches muy apantallador para que todo mundo se dé cuenta de que viene cuidado; las empresas profesionales, lo que hacen es ser lo más discreto posibles y sobre todo, enseñarle a la persona que van a cuidar a cómo cuidarse”.

La seguridad privada está en la mira de la sociedad y de las autoridades federales y locales luego de casos violentos que han protagonizado “guaruras”.

Después del “niño ahogado”

Uno de los casos emblemáticos es el conocido como “Lord Ferrari”. El 11 de marzo pasado circuló en redes sociales un video en donde se observa en Viaducto Tlalpan a un guardaespaldas agredir a un automovilista identificado con el nombre de ”Jair” presuntamente por órdenes del dueño de un automóvil de lujo Ferrari. Después se conoció que era el empresario, Alberto Sentíes (que por cierto hace unos días consiguió un amparo contra la orden de aprehensión en su contra).

Tras este tipo de casos, las autoridades aseguraron que iniciará la regularizaron de estos servicios para no dejar margen a la impunidad.

Una de las propuestas es que los automóviles en los que se transporten los escoltas estén debidamente identificados.

El representante del Consejo de Nacional de Seguridad Privada advirtió que la balización de las unidades podría afectar los trabajos de los elementos de seguridad.

“El Consejo Nacional de Seguridad Privada no cree que sea conveniente, las empresas que prestan un buen servicio son sumamente discretas”, dijo. Sin embargo, respaldó la propuesta de regular a las empresas.

“Lo que quiere la Ciudad de México es tener un registro de esas personas para poderlas evaluar y tenerlas registradas”, indicó.

Las personas que no disponen de altos recursos económicos para contratar seguridad recurren a corporaciones policiacas que prestan este servicio. Es el caso de los policías del Estado de México.

Explicó que muchas empresas los requieren porque su sueldo es menor al estándar. “Es más barato, debido a la falta de capacitación para ser un escolta y la contratación es por el uso de arma, lo que hacen realmente es alquilar el arma”, puntualizó.

Hace un par de meses, el área Jurídica de la Comisión Estatal de Seguridad, que revisa las condiciones en las que operan las empresas que brindan seguridad privada en toda la entidad, clausuró 50 de este tipo de sociedades.

Eduardo Valiente Hernández, comisionado de Seguridad Ciudadana, dijo que se busca abatir el número de empresas de las denominadas “patito”, cuyos propietarios contrataban personal y después de un tiempo cerraban sus oficinas y abandonaban a sus elementos.

Congelada

El proyecto de ley de seguridad privada que la AMESP (Asociación Mexicana de Empresas de Seguridad Privada) presentó al Congreso en 2012, hasta el momento está en comisiones. Concretamente en la Comisión de Justicia de la Cámara de Senadores. Esta iniciativa busca modificar el Artículo 21, párrafo noveno de la Constitución y tiene por objeto regular los servicios de seguridad privada; establecer las bases de integración y acción coordinada de las autoridades de la regulación.

Guía

Si una empresa u organización desea contratar servicios de seguridad privada debe tomar en cuenta lo siguiente:

• Es necesario que todo el personal de seguridad privada cuente con una habilitación; es decir, haber presentado y aprobado un examen de conocimientos sobre la temática de sus labores, servicio, derechos y obligaciones. El aspirante debe contestar correctamente 70% del examen, de lo contrario se calificará como “no apto”.

• Es obligatorio que la empresa de seguridad privada acredite un permiso vigente por parte del Gobierno Federal, emitido por la Secretaría de Seguridad Pública.

• Es recomendable que la empresa de seguridad cuente con el aval de un organismo regulador del servicio, por ejemplo del Consejo Nacional de Seguridad Privada.

• Cualquier empresa que ofrezca soluciones de seguridad privada debe cumplir con estándares de calidad y capacitación estipulados por la Secretaría de Seguridad Pública.


Con información de Jesús Velázquez