Bebida adulterada, podría ser el último trago

 

Puede provocar desde inflamación de la retina hasta la muerte


Inflamación de la retina, diálisis e incluso la muerte son riesgos a los que lleva el consumo de alcohol adulterado, del que en 2017 se aseguraron 87 mil 266 litros por parte de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).

En entrevista, el académico de la Universidad del Valle de México (UVM) Enrique García Azuara, explicó que entre el “adulterante más común está el alcohol metílico o metanol, en lugar del alcohol etílico o etanol, que es el que normalmente se toma”.

Indicó que cuando se toma lo que parece ser un whisky, tequila, brandy, aguardiente o cualquier bebida de sabor intenso, por el sabor no es posible distinguir un alcohol legítimo de uno adulterado, especialmente si se mezcla con refrescos u otros diluyentes.

A este respecto, el comisionado de Fomento Sanitario de la Cofepris, Jorge Antonio Romero Delgado, señaló que sí se ha llegado a detectar la adulteración del alcohol etílico con metanol, sustancia que tiene otros usos de carácter industrial, y “para el organismo es totalmente dañina”.

En este sentido, el especialista de la UVM, García Azuara, precisó que este tipo de alcohol se llega a utilizar en anticongelantes, en líquidos limpiaparabrisas o para limpiar elementos electrónicos, entre otros usos.

Pero al consumirlo, el organismo intenta eliminarlo y se empieza a sentir un dolor intenso de cabeza, náuseas, taquicardias, problemas de respiración, vómitos “y luego viene lo peor: inflamación de retina que puede derivar en ceguera, o en dos o tres días estar muerto”, manifestó.

El catedrático puntualizó que el metanol es muy fuerte y agresivo para el organismo, pero dentro de las primeras cinco o seis horas se puede realizar un lavado gástrico, “y si te pasas de esas seis horas, lo conveniente es hacer una diálisis, es decir, purificar la sangre, porque es un alcohol que no se puede metabolizar”.

Para evitar estos riesgos a la salud, la Cofepris realiza de manera permanente, en conjunto con el Servicio de Administración Tributaria (SAT) y las procuradurías General de la República (PGR) y Federal del Consumidor (Profeco), una estrategia de vigilancia sanitaria contra las bebidas irregulares en fábricas y centros de distribución, puntos de venta y centros de consumo.

El funcionario de la Cofepris señaló que durante 2016 y lo que va de 2017 se han realizado 16 operativos contra estas bebidas en los estados de México, Jalisco, Veracruz, Hidalgo, Puebla, Quintana Roo y Chiapas, con casi 41 mil litros de alcohol incautados en Aguascalientes y poco más de nueve mil 600 litros en Veracruz.

Exhortó a la población en general a comprar las bebidas en lugares formalmente establecidos, evitar los tianguis y puestos de venta ambulantes, dudar de su calidad si tiene un precio claramente menor a los oficiales y revisar que la botella que se va a consumir no contenga sedimentos o algún tipo de materia extraña a la naturaleza del producto.

Además recomendó fijarse muy bien en las etiquetas del producto, que éstas se encuentren en buen estado, que los hologramas y marbetes estén bien pegados, y, de ser posible, destruir la botella para evitar su reutilización.

Romero Delgado destacó la importancia de la participación de la ciudadanía y de los propios productores para realizar denuncias en casos de presuntas irregularidades, mismas que serán atendidas por las autoridades.