Se hace humo dejar el cigarro

 

De 2009 a 2015, el índice de consumo de tabaco se mantiene sin variaciones


Las restricciones para fumar en espacios públicos, así como el alza en los impuestos provocaron que las personas fumen menos, aunque esa disminución es mínima.

De acuerdo con la Encuesta Global de Tabaquismo en Adultos (GATS, por sus siglas en inglés), el consumo de tabaco en general se mantuvo sin cambios entre 2009 y 2015 (total, de 15.9 por ciento a 16.4 por ciento; hombres de 24.8 por ciento a 25.2 por ciento; mujeres de 7.8 por ciento a 8.2 por ciento).

En promedio, los fumadores diarios consumieron menos cigarrillos por día: 7.7 cig/día en 2015, comparado con 9.3 cig/día en 2009; además, entre 2009 y 2015 se observa una disminución significativa de la exposición de humo de tabaco ajeno, en los edificios de gobierno y restaurantes.

Sin embargo, la exposición a humo de tabaco se mantiene elevada en bares y centros nocturnos.

No obstante, los índices de consumo de tabaco en adultos mexicanos permanecen sin cambios, en alrededor de 16 por ciento.

Fortalecer y aplicar la Ley General para el Control del Tabaco, de acuerdo con el Convenio Marco para el Control del Tabaco (CMCTOMS) contribuirá a reducir su consumo.

A pesar de ello, la Fundación Interamericana del Corazón México, la Alianza Nacional para el Control del Tabaco y la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic) revelaron que en el país se consumen 37 mil millones de cigarros al año, lo cual provoca padecimientos respiratorios, cardiovasculares y cáncer, que a diario matan a por lo menos 100 habitantes.

De acuerdo con el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER), se estima que en México casi 11 millones de personas fuman, lo cual representa 15.9 por ciento de la población, además el gasto para atender las consecuencias del tabaquismo asciende a 61 mil millones de pesos al año.

Al presentar la Encuesta Global de Tabaquismo en Adultos, realizada por el Instituto Nacional de Salud Pública México (INSP), la  directora general Técnica Normativa de la Conadic, María José Martínez Ruiz, dijo que el país se dispone a aprovechar el hecho de que 78 por ciento de los fumadores desean dejar el tabaco.

Destacó la importancia de trabajar de manera temprana con niños y jóvenes para evitar que lleguen a consumirlo, para lo cual se ha diseñado una estrategia intersectorial de prevención del consumo de sustancias psicoactivas, incluyendo tabaco, para niños de seis a 12 años y adolescentes de 13 a 17 años.

En su intervención, el coordinador de la Fundación Interamericana del Corazón-Alianza Nacional para el Control del Tabaco (Aliento), Juan Núñez Guadarrama, aseguró que en una encuesta realizada hace diez años, establece que el 70 por ciento de los estudiantes de medicina de 40 universidades del país son fumadores.

Además, señaló que es alarmante que en la actualidad cerca de 30 por ciento de médicos formados son consumidores de tabaco, por lo cual es preciso evitar que los futuros prestadores de servicios médicos sean adictos al cigarro.

“Contamos con instituciones sólidas, con profesionales de la salud, a los que se les debe capacitar con un enfoque estratégico que conjugue el tratamiento farmacológico y la participación de doctores, psicólogos y otros profesionales, con el impulso sin precedente a la consejería breve en el primer nivel de atención”, aseguró Núñez Guadarrama.

Erick Antonio Ochoa, director de Políticas Públicas en Salud Pública de la Fundación Interamericana del Corazón México, dijo no saber a donde va la cantidad recaudada por concepto de impuestos a las empresas cigarreras en el país, ni a qué instituciones del sector médico se destinan para atender a los mexicanos que ya están enfermos por el tabaquismo.

Agregó que una de las opciones para dejar de fumar es utilizar sustitutos de nicotina, en particular los llamados parches de nicotina, pero hay desabasto de estos productos debido a que los médicos de primer nivel no los prescriben, de tal manera que los laboratorios los han ido retirando de las farmacias.