Musgo y heno, vitales para el ecosistema

 

Su extracción descontrolada reduce la biodiversidad de los bosques


Musgo y heno, vitales para el ecosistema

Es común el uso de musgo y heno durante la época decembrina, principalmente para adornar los árboles de Navidad y los nacimientos; sin embargo, las personas desconocen que ambas plantas resultan esenciales en los bosques para la captación de agua, por lo que su extracción ilegal reduce la biodiversidad.

Los investigadores del Instituto de Biología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Claudio Delgadillo Moya y Ana Paola Peña Retes, explicaron que en el país se conocen mil especies de musgo, “pero la mayoría son pequeñas, con una tasa de crecimiento que se mide en milímetros o centímetros por año”.

Así es que es una planta que no se cultiva y tarda siete años en crecer, refieren ambientalistas.

“Los musgos son un grupo muy antiguo que está entre los primeros que ocuparon el ambiente terrestre. Su dependencia del agua se ha mantenido a lo largo de millones de años; aunque pueden sobrevivir en sitios muy secos, el agua es necesaria para su reproducción”, expusieron.

La importancia del musgo también radica en la ayuda a la germinación de semillas de otras plantas. Además de que es un microecosistema; en él habitan más especies de plantas e insectos.

De acuerdo con el artículo “Los musgos y la Navidad ¿incompatibles?, publicado en la Gaceta de la UNAM, los académicos señalan que las especies que comúnmente se usan en las representaciones de los nacimientos navideños en los hogares, son Thuidium delicatulum y Hypnum amabile.

En su hábitat, esta planta, que carece de tejido vascular o leñoso, ayuda a mantener la humedad del suelo y previene la erosión. Además, es esencial para la filtración de agua hacia los mantos freáticos.

“Podría  pensarse en los musgos como plantas casi inmortales. En la época seca pierden líquido y disminuyen su actividad fisiológica, pero la reanudan al humedecerse. La tolerancia a la desecación es notable en algunas especies que pueden sobrevivir meses de sequía y, a pesar de su apariencia, tan pronto se humedecen reinician su vida activa”, señalaron los expertos.

En el caso del heno, considerada una planta epífita (que crece encima de otro vegetal usándolo como soporte pero que no lo parasita nutricionalmente), no es una plaga. Vive en los árboles y también es un pequeño ecosistema que captura agua en menor cantidad.

Es importante destacar que la extracción de cualquier especie de bosques (incluido heno y musgo) es ilegal.

De acuerdo con la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), la extracción de estas plantas está regularizada por tratarse de un recurso natural esencial para la captación de agua y humedad en bosques.

Por ello, si una persona desea explotar estos recursos se debe establecer una serie de requisitos y trámites estipulados en la  Ley General de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente, que dice que para poder extraer musgo, en terrenos, bosques y predios, además deberán estar acompañados de un técnico de la dependencia que certifique que no habrá daño ambiental por su retiro.