Se arma zafarrancho en la ALDF

 

Diputados de la CDMX pasaron de las palabras a los empujones


La calma en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) se acabó para dar paso a golpes y jalones entre diputados del partido Morena y del PRD quienes terminaron por destituir a la presidenta de la mesa directiva, Flor Ivonne Morales, para nombrar en su lugar al diputado Fernando Zárate Salgado.

Ante la insistencia de la presidenta de la mesa directiva para beneficiar con una “manga ancha” a los diputados de su bancada, la de Morena, el diputado Mauricio Toledo demandó igualdad en el trato a los legisladores, durante la comparecencia de la secretaria de Gobierno, Patricia Mercado.

La “gota que derramó el vaso” fue el intento de Morena por presentar y votar una suspensión del dictamen “para aprobar la solicitud de aprobación para la afectación de cantidades remanentes de participaciones federales que le corresponden a la Ciudad de México a efecto de diseñar, construir, poner en marcha, operar y mantener una planta de aprovechamiento de poder calorífico de residuos sólidos”.

En ese momento y ante la petición del diputado Fernando Salgado sobre que se leyera el acuerdo para presentar la moción suspensiva, se desató “la guerra” entre PRD y Morena que inició con gritos entre diputados desde sus curules y acusaciones de mentir de ambas partes y culminó con la toma de la tribuna por parte de Morena.

La mayor recriminación fue hecha por los diputados Leonel Luna, Mauricio Toledo e Iván Texta en contra de la presidenta de la mesa directiva, Flor Ivonne Morales, quién desde la comparecencia, dijeron, dio preferencias a los miembros de Morena que es su bancada y sobre todo porque “le mintió al pleno de la Asamblea”.   

Leonel Luna acusó, en conferencia de prensa, un plan armado por Morena para desviar la atención sobre un tema trascendental como lo es la planta de termovalorizacion y denunció violación del reglamento interno y ley orgánica de la ALDF por parte de Morena diciendo que habían presentado petición de moción suspensiva, lo que no se pudo corroborar.

En entrevista con CapitalMedia, el coordinador de Morena, César Cravioto, señaló que el problema no es lo que pasó en el Pleno, sino la aprobación que le urgía al PRD para comprometer 109 millones de pesos anuales para pagar la electricidad que se genere, la que se venderá por 30 años a un sobreprecio al Metro.

El otro argumento de Morena es que se trata de un negocio del Gobierno capitalino con una empresa extranjera altamente cuestionada por organizaciones internacionales como Greenpeace por prácticas contaminantes en el manejo de residuos, como serán los que usen para generar energía en México y que quema la mayor parte de los residuos sólidos contaminantes.

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FF