Arranca muro en Texas y Arizona

 

Kelly ordena a las agencias migratorias endurecer deportaciones


El muro fronterizo se empezará a construir en puntos clave de la frontera sur en los estados de Texas, Arizona y California, informó ayer el Departamento de Seguridad Interior (DHS) de Estados Unidos.

El titular de la dependencia estadounidense, John Kelly, instruyó a los responsables de las agencias migratorias a su cargo a iniciar de inmediato la planeación, diseño y construcción del muro con México que el presidente Donald Trump ordenó en enero pasado.

Además, como parte de la amplia ofensiva migratoria del mandatario, Kelly ordenó la contratación de más de 15 mil oficiales para detener y deportar inmigrantes indocumentados y ampliar un programa que autorizará a policías locales a actuar como oficiales de migración.

En dos memorandos firmados y dirigidos ayer a los titulares de las tres agencias migratorias bajo su autoridad, Kelly delineó los aspectos principales para la puesta en marcha de la orden ejecutiva que Trump firmó el pasado 22 de enero.

Los memorandos establecen que las agencias federales tendrán una mayor autoridad y sus oficiales federales más poder para detener y deportar de manera más agresiva a inmigrantes indocumentados dentro del país y a lo largo de las fronteras de Estados Unidos.

Para ello, Kelly amplió la lista de inmigrantes indocumentados cuya detención y deportación será prioritaria, y va más allá de los criminales indocumentados. La nueva lista incluirá a cualquier inmigrante indocumentado acusado de cualquier delito que no haya sido resuelto; los que hayan cometido actos que constituyen un delito que puede ser encausado penalmente; y quienes hayan cometido fraude contra el Gobierno Federal, o hayan abusado de programas federales de asistencia pública.

También serán objeto de detención y deportación prioritaria quienes hayan ignorado una orden final de deportación, o quienes “a juicio de un oficial de migración representan un riesgo para la seguridad pública o la seguridad nacional”, se establece en el memorando.

Kelly ordenó la contratación de 10 mil agentes adicionales para la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE); cinco mil para la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP); así como 500 más para la Guardia Costera.

El secretario ordenó también “identificar y cuantificar” todas las fuentes de asistencia federal anual directa o indirecta al Gobierno de México durante los pasados cinco años, incluyendo la bilateral y de desarrollo multilateral, de asistencia económica, humanitaria y militar.

También ordenó al ICE y a la CBP ampliar en los estados fronterizos el programa 287 (g), mediante el cual estas agencias pueden autorizar a las policías locales para que sus oficiales puedan desarrollar funciones de agentes migratorios en “la investigación, arresto y detención de indocumentados en Estados Unidos”.

El programa, que ha sido denunciado por grupos que favorecen la migración y al que se han opuesto algunas policías, está en operación actualmente en 32 departamentos de policía en 16 estados participantes.