Critican censura en llamadas de tirador

La Oficina Federal de Investigaciones (FBI) divulgó ayer las versiones estenográficas de las llamadas de Omar Siddiqui Mateen, autor de la matanza en Orlando, pero su decisión de censurar sus referencias al Estado Islámico detonó una tormenta política en Washington.

“Estoy en Orlando. Y yo cometí los disparos”, dijo Siddiqui por teléfono durante una llamada a la línea de emergencias 911 a las 02:30 de la madrugada del 12 de junio. “En los próximos días verán más acciones de este tipo”, amenazó.

Siddiqui, de 29 años y quien causó la muerte a 49 personas en el club nocturno Pulse de Orlando, sostuvo, asimismo, que tenía a su disposición un vehículo con explosivos fuera del establecimiento y amenazó con poner bombas a los rehenes. “Voy a prenderlo si tratan de hacer algo estúpido”, advirtió en una de las tres llamadas telefónicas. Sin embargo, las presuntas bombas nunca fueron detonadas y el atacante fue sometido por un equipo táctico SWAT de la policía de Orlando, después de tres horas de fallidas negociaciones con el joven estadounidense de origen afgano.

Durante las conversaciones, como había sido reportado antes, Siddiqui externó su solidaridad con el Estado Islámico (EI), así como con los autores del atentado en el maratón de Boston y con el estadounidense que se convirtió en el primer atacante suicida en Siria en 2014.

Pero las versiones estenográficas de las conversaciones fueron parciales, toda vez que el FBI y el Departamento de Justicia decidieron censurar algunos pasajes relacionados con el EI.

“No vamos a propagar retórica violenta, sea del exterior o del interior del país”, justificó el agente del FBI, Ronald Hopper.

Sin embargo, el presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, calificó como “absurda” la decisión de la administración de Barack Obama de no informar.

“Es absurda una edición selectiva de la versión estenográfica. Sedebe dar a conocer la versión completa para que el público tenga claro quién hizo esto”, señaló Ryan.

Las versiones estenográficas divulgadas por el FBI no incluyeron tampoco una porción de las conversaciones donde Mateen jura lealtad al Estado Islámico.