Así es la pelea entre productores de azúcar y EU

AUTOR DEL TEXTO ORIGINAL EN REPORTE INDIGO: J. JESÚS LEMUS

Como resultado de la política proteccionista que intenta implantar el gobierno de Donald Trump, manifiesta en su afán de renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), ya se asoma la primera de las confrontaciones entre los muchos sectores económicos de México con Estados Unidos.

Es la pelea de los endulzantes que ya está en puerta; los productores nacionales de azúcar alertan sobre prácticas desleales de EU para colocar fructosa en el mercado mexicano, mientras que la industria alimenticia de aquel país alega la introducción de glucosa mexicana en volúmenes superiores a los establecidos en el acuerdo de comercio.

El primero en lanzar la piedra ha sido el gobierno de Estados Unidos. El secretario de Comercio norteamericano, Wilbur Ross, anunció la intención del gobierno de ese país de gravar con aranceles de hasta el 44 por ciento a las importaciones de azúcar provenientes de México, si antes del 5 de junio próximo no había una negociación del TLCAN, en el capítulo de los endulzantes.

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La amenaza ha puesto nerviosos a los empresarios productores de azúcar en México, y con justa razón: nuestro país tiene en EU su principal nicho de ventas. Desde el 2008, cuando se acordó la liberación de gravámenes a la comercialización de endulzantes -fructosa de Estados Unidos a México y azúcar de México a EU -, México ha venido desplazando a los principales proveedores del azúcar en Estados Unidos, como Tailandia, India y China, hasta convertirse en el segundo suministrador de ese básico, después de Brasil.

En un comunicado, la Secretaría de Economía del gobierno de México, ha reconocido que, sin que existan prácticas desleales en la venta de azúcar a Estados Unidos, el gobierno de ese país lo que pretende es “limitar el abasto de azúcar cruda de México exclusivamente para sus refinerías y eliminar toda competencia de azúcar refinada de México en el mercado (norteamericano)”.

En reacción natural a la propuesta del gobierno de Estados Unidos para tasar con aranceles las importaciones de azúcar que la industria de ese país haga desde México, los empresarios aglutinados dentro de la Cámara Nacional de las Industrias Azucarera y Alcoholera (CNIAA), que preside Juan Cortina Gallardo, ya han reclamado la intervención del gobierno mexicano para que se investiguen las malas prácticas norteamericanas en la venta de endulzantes sintético, como la fructuosa, en nuestro país.

En la postura oficial sobre el tema, Cortina Gallardo aseguró que ya se han iniciado las gestiones para “la investigación de prácticas abusivas y posiblemente monopólicas” contra el gobierno de EU, el que ha propiciado que los volúmenes de ventas de fructuosa hacia México se hayan triplicado en los últimos años.

De esa forma la Cámara Nacional de las Industrias Azucarera y Alcoholera intenta promover una política espejo, frente al proteccionismo del gobierno norteamericano en el tema de los endulzantes. “Si no nos van a dejar mandar azúcar a Estados Unidos, pues es evidente que la posición de esta cámara y del país tiene que ser de firmeza total en detener la entrada de fructosa que importamos de Estados Unidos”, consideró Juan Cortina Gallardo.

Las cifras de la balanza comercial entre fructuosa norteamericana y azúcar mexicana indican que actualmente, en promedio, el mercado nacional consume entre mil 500 y 2 mil 100 toneladas de fructuosa provenientes de Estados Unidos. En contraparte, México coloca en el mercado de Estados Unidos un estimado de 145 mil toneladas de azúcar.

El Plan B

De acuerdo a las cifras de la Secretaría de Economía, la producción de azúcar para este año se estima en casi 6 millones de toneladas, de las que al menos casi 4.5 millones de ellas se destinarán al consumo interno.

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En la encrucijada en la que se encuentra el azúcar de México existe el Plan B, consideró Juan Cortina, quien dijo que este se finca en el cuidado del mercado de consumo interno que puede absorber los volúmenes que eventualmente no se pudieran enviar al mercado de Estados Unidos.

Tampoco se descarta la posibilidad de buscar otros mercados alternos como Burkina Faso, Canadá, Mauritania, Colombia, Holanda, Chile, Suiza, Jamaica y República Dominicana.

A la fecha, con niveles de producción que se manifiestan en franco crecimiento, México se ubica -de acuerdo a datos del Fideicomiso Instituido en Relación a la Agricultura (FIRA)- como el séptimo productor de azúcar en el mundo, por debajo de Brasil, India, Unión Europea, Tailandia, China y EU.

La producción de azúcar es una de las industrias consideradas como estratégicas para la soberanía alimentaria del país, de acuerdo al Plan Nacional de Desarrollo 2012-2018, pues ese sector genera más de 440 mil empleos directos y beneficios económicos indirectos a más de 2.2 millones de personas. Sus actividades productivas se desarrollan en 227 municipios de 15 entidades federativas, donde habitan más de 12 millones de personas.

Sector rentable

La amenaza del gobierno norteamericano para gravar sus importaciones de azúcar se dan en un momento en que la industria azucarera de México fincaba sus expectativas de crecimiento en el consumo interno de Estados Unidos, hacia donde se destina más del 87 por ciento de las exportaciones, principalmente para la industria refresquera, alimentaria y de fabricación de alcoholes.

Por esa razón, el sector empresarial del ramo ha reclamado la rápida intervención de la autoridad mexicana, a fin de que vele por los intereses de la industria azucarera del país.

De los 51 ingenios productores de azúcar los más rentables son los 11 que opera el Grupo Beta San Miguel, donde en promedio por ciclo de caña de azúcar se obtiene un rendimiento estimado en un millón 400 mil toneladas de endulzante; la empresa Zucarmex, con la operación de seis ingenios produce por ciclo cerca de un millón 200 mil toneladas de azúcar.

Otras empresas sobre las que se soporta la producción de azúcar nacional son Grupo Porres, que con 4 ingenios genera una producción promedio de 500 mil toneladas de azúcar; Grupo Piasa, que produce más de 450 mil toneladas de azúcar por ciclo; Grupo Azucarero México genera casi 400 mil toneladas de azúcar en cuatro ingenios; con tres ingenios, el Grupo Sáenz produce casi 250 mil toneladas de azúcar, mientras que el Grupo Azucarero del Trópico produce en dos ingenios más de 220 mil toneladas de azúcar por ciclo.

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