Denuncian caso de desaparición forzada en Guerrero

A un mes de la desaparición y asesinato de Jorge Cortés Carmona, en Guerrero, integrantes de la Red Solidaria Década Contra la Impunidad, junto con familiares, denunciaron omisión de las autoridades en torno del caso y exigieron su esclarecimiento.

“Hubo mucha tardanza de las instituciones de procuración de justicia y de seguridad para buscar inmediatamente después de la denuncia que apareciera mi sobrino”, detalló Efraín Cortés, tío de la víctima.

De acuerdo con la información de testigos, cerca de las tres de la mañana un grupo de personas sometió al estudiante de la Facultad de Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Autónoma de Guerrero mientras se encontraba en una tienda de conveniencia, 11 días más tarde su cuerpo fue encontrado en una fosa clandestina con signos de tortura.

El caso se presentó ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y al Grupo de Trabajo de Desaparición Forzada e Involuntaria de la ONU para que se pronuncien al respecto y emitan recomendaciones al Estado mexicano a fin de tener acceso a la justicia.

Efraín, sobreviviente de la matanza de El Charco, en 1998, y quien desde entonces lucha en defensa de los derechos humanos, apunta que el ataque perpetrado contra su sobrino tiene tintes políticos y estrecha relación con su activismo.

“Nosotros tenemos años, décadas, en la lucha social. Tenemos un interés de que se establezca lo que pasó en El Charco, entonces creemos que por eso fue.

“Aunque mi sobrino no estaba metido en eso, pero el vínculo es muy estrecho, no hay una situación de un familiar alejado, no, es un familiar donde había muchísima comunicación”, consideró.

Asimismo, apuntó que en la desaparición y posterior asesinato del estudiante, participaron agentes del Estado.

“Es desaparición, pero aparte hay tortura a mi sobrino, pues lo asesinaron a golpes y ahí lo enterraron para perder la evidencia del cuerpo. Entonces los que hicieron eso no son un grupo así, improvisado, hay una motivación, son grupos que operan y ahí sospechamos que en esa acción de desaparición tortura y entierro del cuerpo participaron instituciones del Estado”.

Recordó que el cadáver del joven estudiante fue identificado por la madre gracias a diversos objetos personales, como el cinturón; sin embargo, se espera que en los próximos días el dictamen de las pruebas de ADN confirme la identidad.

Ante la omisión de las autoridades para avanzar en las investigaciones, integrantes de la red exigieron una indagatoria transparente, pronta y expedita, la consignación de los autores materiales e intelectuales de esta desaparición forzada y ejecución extrajudicial, así como la investigación a autoridades locales e institucionales de seguridad estatales y federales que operan en la región.