Gertz Manero, en la lista de los Paradise Papers

 

Wilbur Ross, colaborador de Trump, también está involucrado


Documentos filtrados por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ, por sus siglas en inglés) hicieron públicos los llamados Paradise Papers, una investigación periodística basada en una filtración que incluye 13.4 millones de documentos que evidencian a políticos, príncipes, empresarios, oligarcas, estrellas de Hollywood y deportistas de élite, al igual que a algunas de las más grandes multinacionales y algunos bancos de prestigio en el mundo, como Apple, Nike, Uber, Citigroup, HSBC, e incluso universidades, en sus esfuerzos por pagar menos impuestos, adquirir propiedades de lujo y esconder fortunas, entre otras operaciones.

En la investigación también hay empresarios mexicanos y corporaciones extranjeras con operaciones en México que utilizan el “paraíso fiscal” de Barbados como una plataforma de operación e inversión libre de impuestos.

Uno de los personajes nacionales ligado a la investigación es el exsecretario de Seguridad Pública del Gobierno del Distrito Federal, funcionario en las administraciones de Cuauhtémoc Cárdenas y Rosario Robles Berlanga, y secretario de Seguridad Pública federal en el sexenio de Vicente Fox, Alejandro Gertz Manero, quien aparece vinculado a la sociedad de inversión Jano Limited, que incorporó su hermano Federico Gertz Manero, en septiembre de 1995 en las Islas Caimán, junto con su concubina Laura Morán Servín.

Gertz Manero había señalado con anterioridad que no sabía de la existencia de dicha sociedad, pese que fue designado vicepresidente de Jano Limited en febrero de 1998.

En su momento reconoció que su hermano probablemente no indicó a las autoridades mexicanas que tenía una compañía en las Islas Caimán: “No creo que nadie que haga una empresa de esa naturaleza le va a avisar a las autoridades fiscales porque no tendría ningún sentido”, dijo. A su juicio, eso no era lo importante, sino saber el origen del dinero.

Según los documentos internos de Appleby, Jano Limited, Federico Gertz Manero y Laura Servín Morán eran los dos beneficiarios finales de la estructura offshore.

El exfuncionario, quien condujo en México la llamada “Operación Cóndor” –una campaña antidrogas organizada por la agencia antidrogas estadounidense (DEA) en América Latina en los años 70–, se encuentra actualmente en un proceso judicial en el que demandó a Laura Morán Servín, madre de Laura Cuevas Morán y suegra del gobernador mexiquense Alfredo del Mazo Maza, a quien acusó de asesinar a su hermano y de robar dinero de la herencia familiar.

Las fuentes

La información de la investigación procede de dos bufetes de abogados dedicados a proveer servicios offshore: Appleby, fundada en Bermudas, y Asiaciti Trust, en Singapur, y de los registros mercantiles de 19 jurisdicciones consideradas como “paraísos fiscales”.

Los documentos fueron filtrados al periódico alemán Süddeutsche Zeitung, que los compartió con el ICIJ y una red de más de 380 periodistas en 67 países.

Participaron 380 periodistas de 67 países, entre ellos, la BBC, The Guardian, La Nación, Le Monde y The New York Times.

En los documentos se pueden apreciar los lazos entre Rusia y Willbur Ross, el multimillonario secretario de Comercio del presidente estadounidense Donald Trump, quien tiene acciones en una empresa naviera que desde 2014 ha recibido más de 68 millones de dólares de una compañía de energía rusa, copropiedad del yerno del presidente ruso Vladimir Putin.

También se exponen los negocios secretos de Stephen Bronfman, principal recaudador de fondos del primer ministro canadiense Justin Trudeau, los intereses offshore de la reina de Inglaterra, así como los vínculos bajo este esquema de más de una docena de asesores de Trump, miembros de su gabinete y grandes donantes. Incluso se encuentran involucrados artistas como Madonna y el cantante de U2.

Qué es el offshore

Los entornos offshore facilitan la creación de empresas cuyos propietarios son difíciles o imposibles de rastrear. Aunque puede ser legal, su estructura atrae a lavadores de dinero, narcotraficantes y evasores en general.

Las empresas de este tipo son a menudo un “caparazón”, no cuentan con empleados ni oficinas y se utilizan en complejas estructuras de evasión fiscal que cuestan cantidades millonarias en las tesorerías nacionales.

Brooke Harrington, gestora de riqueza certificada y profesora de la Copenhagen Business School, dijo que “hay un pequeño grupo de personas que no están sujetas a las leyes como el resto de nosotros, y eso tiene un propósito”. Estas personas “viven el sueño” de disfrutar “los beneficios de la sociedad sin estar sujetos a ninguna de sus limitaciones”.