Jóvenes, víctimas de homicidios con armas

 

En 2015 se contabilizaron 10 mil 462 homicidios dolosos y en 2017 se incrementaron a 29 mil casos


En 2015 se contabilizaron 10 mil 462 homicidios dolosos y en 2017 se incrementaron a 29 mil casos, lo que colocó a este año como el más violento en la historia contemporánea del país.

En ese periodo se implementó y ajustaba el Sistema Penal Acusatorio, que entró en vigor de manera obligatoria en toda la República en junio de 2016, y una de las críticas que persiste es la despenalización de la portación de armas de fuego, queja que se refuerza con las estadísticas de crímenes.

De  2014 a 2017, 29 mil 955 personas fueron imputadas por transgresiones del orden federal, más de la mitad por portación de arma.

De los hombres con carpeta de investigación, 58.1 por ciento enfrenta cargos por portación de arma, 20.2 por delitos contra la salud y 9.7 por robo de hidrocarburos.

El 32.4 por ciento de mujeres por portación de arma, 31.8 por delitos contra la salud y 5.3 por robo de hidrocarburos. De acuerdo con el estudio Índice de Paz México 2018, realizado por el Instituto para la Economía y la Paz, el mayor número de víctimas son atribuidas a la delincuencia organizada, pues fueron asesinadas en medio de tiroteos, ejecuciones grupales, con huellas de tortura, desmembramientos, decapitaciones, y en algunos casos sus restos fueron hallados en fosas clandestinas y otros en la vía pública con narcomensajes.

Destaca que entre los afectados están hombres jóvenes asesinados con rifles de asalto y pistolas, entre otros artefactos; además de que el promedio de muertes violentas en el país pasó, de 53 por ciento en 2016, a 69 por ciento en 2017.

“Los hombres jóvenes son más afectados por la violencia relacionada con la delincuencia organizada y, de hecho, en México enfrentan una tasa de homicidios mayor que las mujeres”, según el reporte.

En 2017, 87 por ciento de las víctimas de homicidio fueron hombres, 71 por ciento mayores de 18 años, aunque la mayoría de los asesinados son jóvenes que no superan los 30 años, y la tasa de homicidios de varones suele ser ocho veces mayor que de las mujeres.

El aumento de las agresiones en contra de personas del género masculino representa un factor de riesgo para México, ya que a medida que el número de familias con hombres desaparecidos aumenta, también se eleva la violencia, pobreza y otras formas de crisis social.

“Los jóvenes  de México también corren riesgos, ya que 69 por ciento de las personas de 12 a 29 años que fueron testigos, víctimas o participantes en un acto de violencia con armas de fuego reportaron que ni los miembros de su comunidad ni la policía local actuaron como respuesta al incidente”, según el análisis.

El estudio revela que muchas de las agresiones comienzan en el seno familiar y tienen una relación directa con violencia intrafamiliar.