Seguridad en reunión AMLO-Pompeo, discreta

 

Ebrard detalla perfil de encuentro; rol del EMP está en entredicho, opinan expertos


La seguridad durante la reunión entre los representantes del gobierno de Estados Unidos y el virtual presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, es uno de los temas que genera más inquietud, en virtud de que el propio candidato ganador se ha pronunciado por evitar los cuidados del Estado Mayor Presidencial (EMP).

Marcelo Ebrard, propuesto como secretario de Relaciones Exteriores, dijo que se garantizará la seguridad para el encuentro entre López Obrador con el secretario de Estado de Estados Unidos, Michael Pompeo, pues a la reunión también asiste Jared Kushner, yerno y asesor del presidente Donald Trump; el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin; el de Seguridad Interior; así como William Duncan, el encargado de Negocios de la Embajada de Estados Unidos en México, entre otros.

Ebrard Casaubón detalló que se solicitó a la Secretaría de Seguridad Pública capitalina limitar el tránsito vehicular en la calle de Chihuahua 216, colonia Roma Norte –donde se ubica la oficina de López Obrador y se llevará a cabo el encuentro entre las 13:00 y 14:00 horas– en el tramo de avenida Insurgentes con Monterrey.

El Servicio Secreto, que resguarda la delegación de alto nivel estadounidense, sólo tendrá acceso al patio de las oficinas y en el exterior del inmueble, por lo que rechazó que “tome la casa” el próximo viernes 13 de julio. De parte del gabinete del próximo presidente asisten Carlos Urzúa, propuesto como secretario de Hacienda; Alfonso Durazo, para la Secretaría de Seguridad Pública; Graciela Márquez, de Economía, y Jesús Seade, quien encabezaría el equipo negociador de México en la renegociación del TLCAN.

“Va a ser aquí la reunión porque ésta es la sede del gobierno electo, no tiene por qué ir a ningún otro lado”, expresó Ebrard.

El papel del EMP

En enero de este año, como candidato, el tabasqueño aseguraba que renunciaría a la seguridad que brinda el EMP, pero hace un par de días decía que “lo está reflexionando”, según compartió Olga Sánchez Cordero, propuesta para la Secretaría de Gobernación.

“No va a poder desaparecer el Estado Mayor Presidencial porque cumple muchas otras funciones, por ejemplo, de informarle al presidente sobre hechos y hasta de movimientos sociales, aunque él dice que la guardia nacional le va a informar directamente a él, pero siempre ha sido el EMP. Siempre ha sido muy relevante su labor”, considera el periodista José Reveles.

Ante la propuesta de Andrés Manuel de no tener cerca al EMP, Emilio Vizarretea Rosales, académico de la UNAM enfocado en temas de seguridad, asegura que “lo que está detrás, y lo quiero decir con mucho respeto, es una visión poco conocedora de la operación y funcionamiento de estos órganos, como el EMP”.

Para Reveles más que ingenuo “es un rasgo de populismo. Es como decir miren yo no tengo nada que temer porque no debo nada, no tengo que andar con un escuadrón de guaruras”.

El EMP está integrado por unos 2 mil 500 elementos de Fuerzas Armadas, Policía Federal y Civiles; incluso en 2013 el presidente Enrique Peña Nieto decretó el 18 de febrero como el Día del Estado Mayor Presidencial.

“El EMP se fue formando como una élite con un poder y con una capacidad de investigación no solamente de otros individuos, sino de investigación de movimientos sociales. Su papel realmente no era sólo cuidar al presidente y a la familia del presidente”, explicó el académico de la UNAM, René Jiménez Ornelas.

La presión sobre una intención de deshacerse del EMP llevó a Alfonso Durazo a explicar públicamente que lo que buscarán es que estos elementos del EMP se reintegren a los cuarteles en la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), aunque los expertos vuelven a salir para corregir que en esta agrupación hay personal de la Marina y de la Policía Federal.

“Tendrán que formar cuadros de gente que sepa cuidar, me refiero a grupos que pueden pertenecer a las nuevas propuestas de cuerpos como Gendarmería o lo que propone López Obrador y ahí constituir cuerpos que pertenezcan a sus instituciones y no que se hagan cuerpos de élite”, señaló Jiménez Ornelas.

Alta concurrencia

La preocupación sobre la seguridad está fundada, entre otras razones, por la alta concurrencia de personas a la casa de la colonia Roma, donde las reuniones con el equipo de transición son permanentes.

En la esquina de las calles de Chihuahua y Monterrey se incrementó el martes la presencia de simpatizantes que llegan para solicitar apoyo y de periodistas que cubren las actividades del virtual presidente electo. Desde la semana pasada, policías capitalinos hacen rondines en la zona.

Ayer, desde las 5:30 horas llegaron ciudadanos para presentarle propuestas, como Secundino Emilio Escalante, de 63 años y de oficio pepenador, para reciclar residuos. “Él me dio esta tarjeta y me dijo que cuando ganara lo buscara”, dijo.

Orgulloso mostró la tarjeta enmicada que le dio López Obrador; su credencial que lo acredita como integrante del gobierno legítimo; su constancia como vigilante del voto el 1 de julio y un diploma de Morena que agradece su trabajo como militante.

Fernández esperó dos horas y media a que llegara López Obrador. Aunque apenas eran unas 10 personas las que lo esperaban en su oficina, sólo pudo saludarlo. Solicitó una entrevista, sin embargo, le indicaron que por la agenda era complicado.

Otra de las que madrugó fue la poblana Eligia Duayer Escobar, quien con una cartulina solicitaba un espacio en el nivel superior para su hijo. De las 15 personas que lo esperaban en la mañana, para el mediodía ya eran más de 50. Esas personas, son, según Andrés Manuel, su seguridad.