Escritora balconea acoso sexual de Dustin Hoffman

Desde que se dio a conocer la investigación sobre Harvey Weinstein y sus abusos sexuales, en Hollywood no se han dejado de recibir nuevas denuncias que señalan ya no sólo al poderoso productor, sino a algunas de las más queridas figuras del mundo del entretenimiento.

Ayer fue el turno de Dustin Hoffman, a quien la escritora Anna Graham Hunter lo acusa de acosarla en 1985, cuando ella tenía 17 años.

En aquel entonces, Anna Graham Hunter daba sus primeros pasos en el mundo laboral como asistente de producción en la película La muerte de un viajante, protagonizada Dustin Hoffman. Impulsada por las recientes denuncias en la prensa, Graham decidió contar en una columna para The Hollywood Reporter la pesadilla que vivió.

“Esta es una historia que he contado tantas veces que me sorprendo cuando alguien que conozco no la escuchó. Dustin Hoffman me acosó sexualmente cuando tenía 17 años y hacía una pasantía como asistente de producción en el set de La muerte de un viajante. En mi primer día de trabajo Hoffman me pidió que le diera un masaje en los pies. Lo hice. Él abiertamente me coqueteaba, me agarró las nalgas y me habló de sexo. Cuando una mañana fui a su camerino para saber qué quería desayunar, dijo: ‘Voy a tomar un huevo duro… y un clítoris pasado por agua’. Salí, sin decir palabras. Luego fui al baño y lloré”.

Así comienza la columna de Graham Hunter que denuncia a Hoffman —protagonista de El graduado y Tootsie— y se suma a las voces de las víctimas que ponen en discusión pública lo que durante muchos años ocurrió en Hollywood y, hasta ahora, nadie había denunciado.

Hace poco Graham le comentó este episodio a un periodista, que le dijo que iba a tener que cotejar lo que ella decía y esto la hizo reflexionar sobre qué podían decir quienes habían presenciado esos momentos. Algunos podrían decir “que no parecía muy molesta y que seguro me había reído bastante”.

La escritora asegura que durante las cinco semanas que estuvo en el set le escribió a su hermana todas sus vivencias y se guardó una copia para ella y ahora, a raíz de lo que está ocurriendo, las volvió a leer y allí, una vez más, estaban todos los recuerdos de las situaciones y las conversaciones inapropiadas que tuvo Hoffman con ella.

En otra ocasión, recuerda, el actor la tocó en sus partes íntimas “cuando caminábamos hacia su limusina. Me agarró las nalgas cuatro veces. Y yo le pegué fuerte cuatro veces, y le dije que era un viejo sucio”.