Viven capitalinos con incertidumbre por sus casas

Cientos de familias en la Ciudad de México viven con la incertidumbre sobre sus viviendas, consideradas de alto riesgo tras el sismo de magnitud 7.2 Richter del pasado martes.

Aunque muchos ya las desalojaron, algunos se adentran para rescatar sus pertenencias, corriendo el riesgo de que puedan colapsarse.

Es el caso de la calle Osa Mayor y de un edificio de 12 pisos ubicado en avenida Doctor Lucio, en la colonia Doctores, el cual tiene una fractura que se acrecienta hasta alcanzar más de medio metro de longitud en su punto más alto, lo que hace parecer como si las dos partes del edificio estuvieran suspendidas en el aire, como lo constató CAPITALMEDIA en un recorrido.

Lo condóminos colocaron tablas, puertas y láminas para poder caminar sobre “el vacío” en cada piso, y así salvar desde ropa hasta muebles completos, ante la ausencia de autoridades de Protección Civil que se los impidieran.

“Ha venido Protección Civil pero nada más ven el edificio desde fuera, no entran a hacer revisiones y, así ¿cómo nos pueden decir algo certero si no entran a revisar el edificio?, que nos digan ya realmente lo que tiene”, expresó Jaqueline Carmona, administradora de Osa Mayor.

En otro punto de la capital del país los afectados piden a las autoridades ayuda para salvar o reconstruir su patrimonio.

“No nos han hecho un dictamen, nuestra casa de campaña está en la calle porque no nos podemos mover, necesitamos ayuda pues es lo único que tenemos”, dijo Luz María, vecina de un edificio de dos pisos ubicado en la calle Independencia número 18, en Iztapalapa, donde se concentran alrededor de 90 personas en 37 departamentos.

Hasta este domingo el gobierno capitalino ha recibido más de 11 mil 200 solicitudes, de las cuales se han atendido

siete mil 649, principalmente en las delegaciones Cuauhtémoc, Gustavo A. Madero, Benito Juárez, Coyoacán, Xochimilco, Tlalpan e Iztapalapa.

De los siete mil 649 inmuebles, seis mil 640 están en la clasificación verde, lo que significa que sólo necesitarán reparaciones menores; 688 en amarillo, que pueden ser habitables aunque no de manera inmediata, dependiendo de su gravedad, y 321 en rojo, ésta última considerada de alto riesgo y que tienen que ser valorados a fondo.

El delegado de Cuauhtémoc, Ricardo Monreal Ávila, dijo en una transmisión en redes sociales que al momento se han realizado 270 evaluaciones a 264 viviendas y edificios; en 74 de ellos hay riesgo alto, es decir, se requiere apuntalar, intervenir o, en casos extremos, demoler, tal como sucede en Versalles 37 y Génova 33, inmuebles que, señaló, ya están autorizados para demoler.

En Xochimilco la situación es todavía más grave. Sólo en el barrio de San Gregorio la mayor parte de las casas o están colapsadas o son consideradas de alto riesgo, como lo muestran las insignias pintadas por personal de protección civil en las fachadas de las casas.