¿Aumentos injustificados de precios?

 

Comenzamos el año con incrementos


Comenzamos el año con aumentos de precios (combustibles, tortillas) y, como es lógico, con las quejas de los consumidores, ante las cuales las autoridades de la Secretaría de Economía respondieron con toda la corrección política de la que son capaces, afirmando que de ninguna manera permitirán aumentos injustificados de precios, afirmación políticamente correcta que nos remite a esta pregunta por demás pertinente: ¿cuándo un aumento de precios resulta injustificado?

Para responder preguntémonos cuándo sí se justifican los aumentos en los precios. En primer lugar cuando la cantidad demandada resulta mayor que la cantidad ofrecida, es decir, cuando hay escasez. En segundo lugar cuando ha habido un aumento en los costos de producción, es decir, una reducción en la utilidad del empresario. En ambos casos, si el consumidor quiere seguir disponiendo del bien, debe estar dispuesto a pagar un precio mayor, y las autoridades deben permitir el aumento.

Dicho lo anterior podríamos concluir que un aumento de precio resulta injustificado cuando el oferente, sin que la cantidad demandada sea mayor que la cantidad ofrecida y/o sin que haya habido un aumento en los costos de producción, aumenta el precio, con la intención de obtener una mayor ganancia (habrá que ver la reacción de los consumidores ante dicho aumento). En tal caso lo que ocasiona el aumento en el precio no es, ni un aumento previo en el costo de producción, ni una cantidad demandada mayor que la cantidad ofrecida, sino el afán de lucro del oferente, algo que muchos consideran éticamente reprobable, sin que realmente lo sea.

Un aumento de precio, consecuencia del afán de lucro del oferente, ¿es injustificado y por lo tanto reprobable? Para responder preguntémonos si cualquier oferente (ojo: cualquiera), de cualquier bien o servicio (ojo: cualquiera), tiene el derecho de ofrecer su mercancía al precio que resulte más conveniente para maximizar sus utilidades.

Si lo hace, ¿viola algún derecho de alguien? No. Entonces, ¿por qué prohibírselo? ¿Por qué calificar dicho aumento, efecto del afán de lucro del oferente, como injustificado?

[email protected]