Cuando te toca, aunque te quites

Y llegarán los días fatales. Y el dólar seguirá siendo el corazón, el pálpito y el respiro de este país. Y el peso seguirá siendo volátil, porque al parecer nuestros gobernantes no sintieron la obligación de proteger la moneda nacional. Nos vamos aproximando al final de enero y si bien Julio César tuvo los idus de marzo, México tendrá las tormentas de febrero.

No sólo porque llegará a su fin la sexta y más crucial ronda de negociaciones del TLC, sino porque además en medio de la campaña de elecciones intermedias en EU se evidenciará una serie de aspectos que les saldrán muy caros, y otros, muy baratos como el hecho de golpear al mexicano.

En función de eso sigo pensando que es muy posible que entre febrero y marzo llegará el momento en el que Trump dejará caer el TLC, a pesar de que eso condenará a un grave perjuicio económico a los suyos, porque al final alguien encontrará la manera de recuperar ese dinero.

México sobrevivirá sin el TLC, hemos sobrevivido a pesar de todo, de estar con los españoles, sin los españoles; con la invasión de los gringos, sin los gringos; con TLC, sin TLC.

El impacto económico que enfrentaremos a corto plazo no es muy difícil de prever, y es que esa situación provocará un vaivén en el peso frente al dólar y una inflación que podría superar a la que actualmente se registra de manera histórica en 6.77%.

Le guste o no somos hijos del TLC y varias generaciones de mexicanos se han criado pasando por el rubicón del libre comercio con el gringo, era como si estuviéramos un poquito más cerca del primer mundo.

Ahora, de pronto, estamos reprobados y podríamos quedarnos solos, aunque yo creo que el posible fin del TLC no sería el fin del país, ya que sería una magnífica oportunidad para redefinirnos.

Sin duda este 2018 será duro y celebraremos las elecciones del 1 de julio en medio de todo esto. Sin embargo, seremos capaces de sobrevivir, votar y tener un futuro sin TLC. Y en ese sentido, los candidatos, los políticos y el gobierno ya tendrían que empezar a preparar medidas para enfrentar esa situación.

¿Qué nos va a pasar cuando nos quedemos solos con nuestros pesitos y el dólar vuele a una altitud inalcanzable? ¿Cuánto se elevará el precio del gas LP? ¿Cuánto costará la gasolina? ¿Cómo podremos salir de esto? Yo creo que como siempre lo hemos hecho, es decir, trabajando, esforzándonos y sin tomar tan en serio a los gobiernos en turno.

Mientras tanto los candidatos, los partidos, los empresarios, los sindicatos y los ciudadanos debemos saber una cosa: la fecha se aproxima, el invierno está cerca y lo único que hay que controlar es el efecto expansivo del tsunami del miedo

@antonio_navalon