El reajuste

 

Esta elección está siendo todo un desfile de realidades


En menos de una semana habrá una respuesta. Aunque viéndolo bien todas las respuestas están empezando a generarse de manera inmediata.

En política existe una diferencia entre lo que parecía, lo que pensábamos y lo que realmente es. Lo bueno es que esa diferencia la hace el nivel de credibilidad, convicción e ilusión que tienen los pueblos.

Ahora más allá de las alianzas, de las declinaciones y de saber si todo eso dará un mejor o peor gobierno en caso de que se llegue a traducir así en el resultado electoral del próximo 4 de junio, especialmente en el Estado de México, a mí me parece que una de las grandes lecciones de estos comicios es el reajuste de las personas.

Es innegable que el protagonista de esta elección ha sido Zepeda en nombre de un partido que atraviesa por una profunda crisis de identidad como es el PRD.

También es imposible negar que sin importar que en el pasado haya sido candidata presidencial, ahora Josefina Vázquez Mota tanto en su discurso como en su manera de hacer política sencillamente colapsó y no llegó a los votantes de esta elección.

Pero además, independientemente de los errores de sus estrategas mexicanos o extranjeros, las preguntas siguen siendo las mismas: ¿cuál es el juego real de su partido? ¿Quién la sostiene y quién la deja caer para que sea arrollada por sus propios desconocimientos y dudas?

La elección del Edomex ha sido de quiénes conocen el territorio y ha servido para demostrar que no basta con vivir en las zonas periféricas para poder competir y comunicarse con los mexiquenses. El PRI está dejando de manifiesto un fenómeno nuevo e inédito. Y es que, nunca antes los priistas tuvieron resquebrajamientos en sus comportamientos y tampoco habían llegado a la determinación que lo mejor que le puede pasar a su partido es que haya un cambio de gobierno.

Y, por último, esta elección está sirviendo de prueba para saber hasta dónde podrá llegar la creencia profunda de lo que representa la esencia política de Andrés Manuel López Obrador.

No importa cuántas veces abraces, perdones o pidas la reconciliación, lo que importa es saber si dentro de tu corazón existe realmente esa posibilidad o sólo es táctica.

El descubrir, entender y apostar por eso va a ser clave en esta elección. Pero por otra parte, el papel discreto pero importante, confiado y confiable de Delfina, también ha resultado ser clave en la decisión final de por quién votar.

El día de ayer entre eventos multitudinarios, promesas, descalificaciones hacia los oponentes y defensas por acusaciones realizadas por otros candidatos, llegaron los cierres de campaña, dejando en claro una cosa: esta elección está siendo todo un desfile de realidades.