El tiempo pasa… en el TLC

 

Será a finales de noviembre próximo cuando se tenga un nuevo tratado comercial con EU y Canadá


La tarea del próximo gobierno es continuar con las renegociaciones del TLC, concretar lo esperado y evitar que Donald Trump aproveche el vacío y quiera imponer su agenda de intereses político-comerciales.

De acuerdo con la información existente y lo que se vislumbra, es que será a finales de noviembre próximo –antes del cambio de gobierno en el país– cuando se tenga un nuevo tratado comercial con EU y Canadá.

El tiempo se debe a que permitirá al gobierno entrante empezar a trabajar en otros acuerdos y tratados comerciales importantes, sin que tenga un desgaste innecesario por las conversaciones del TLC, que deberán dejar muy avanzadas los negociadores del gobierno actual y los integrantes del equipo de transición.

Y es que, por ejemplo, Javier Guzmán, subgobernador del Banco de México, recomendó que en la renegociación del TLCAN con Canadá y Estados Unidos prevalezca “el sentido común”, según la transcripción de su participación en un seminario el lunes en Londres. “Por lo general, es preferible equivocarse del lado de la precaución en una situación de alta incertidumbre”, añadió.

De acuerdo con una encuesta del Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública, 48.8% de la muestra considera que Estados Unidos ha sido el mayor beneficiado con el TLCAN. Hoy el balón está en la cancha de Donald Trump, pues ya ganó tiempo con el periodo electoral en México y ahora buscará salir beneficiado, ya que por el momento será en su país donde inicien las campañas.

Estados Unidos tiene la consigna de que el TLCAN sea aprobado. Hay un gran interés en ello por parte de senadores y gobernadores fronterizos. Y es que lo político y lo comercial es lo que ha revuelto Donald Trump; su visión de la globalización tiene una alta carga de críticas y evita tener un plan económico y comercial de un tema como es la renegociación de acuerdos comerciales.

Y es que no es válido que, después de dos décadas, se quiebre el acuerdo comercial y se busque una región fragmentada. Ahora, el factor tiempo ha comenzado a jugar en favor de México y Canadá ante el proceso electoral que se vivirá en EU y las presiones que recibirá el gobierno de Trump.