Empresarios detienen a la economía

 

Exigen meter al redil a los maestros que pusieron en jaque político y económico a la entidad


El reciente paro laboral de empresarios en Oaxaca es el botón de muestra de lo que puede iniciar, en una entidad y comenzar un efecto contagioso en otras regiones. Primero salieron a protestar contra la Ley 3de3 y consiguieron audiencia presidencial. Ahora cerraron tres mil negocios en Oaxaca. Pero ahora no quieren audiencia, piden piso parejo para la CNTE. Exigen meter al redil a los maestros que pusieron en jaque político y económico a la entidad.

Aunque parezca sorpresiva esta protesta empresarial, no es un recurso nuevo ni privativo de México. En Brasil, en marzo pasado los líderes empresariales del país sudamericano adoptaron la figura del pato como un símbolo en su lucha contra lo que describen como la charlatanería de Rousseff en materia económica.

Y en ese mismo mes, decenas de empresarios y comerciantes venezolanos asentados en las poblaciones limítrofes con Colombia, marcharon por las principales calles del municipio San Antonio del Táchira, pidiéndole al gobierno del presidente Nicolás Maduro que le dé apertura a los puentes internacionales.

Los manifestantes afirmaron que las pérdidas por esta medida se han vuelto incalculables, teniendo que recurrir al despido de gran parte del personal al no poder sustentar los gastos de operación que ha dejado este cierre fronterizo.

En Uruguay hay un grupo de empresarios del interior del país que alista un recurso de inconstitucionalidad contra la ley de inclusión financiera, ya que cuestionan el artículo que se refiere a los aranceles que cobran los emisores de tarjetas.

El presidente de la Confederación Empresarial del Uruguay, Miguel Feris, afirma que respetan el espíritu de la ley, pero esa parte del articulado genera inequidades entre los pequeños empresarios y los grandes, provocando además el encarecimiento de los productos y servicios que prestan.

Estos movimientos en América Latina no son gratuitos. Se debe aprovechar la coyuntura para el reacomodo de fuerzas, ya que las cúpulas empresariales por mucho tiempo gozaron del apapacho gubernamental. Pero ahora se encuentran en una situación tensa en la que se pone a prueba su “institucionalización”. Ojalá sea pasajero porque no se puede olvidar que los empresarios detienen a la economía.

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@drcamartinez