Esperando al jaguar

 

La renuncia de Castañeda a favor de Ríos Piter tiene un precio


Y de pronto Armando Ríos Piter se levantó. Y ahora, no sólo puede ser la esperanza blanca del PRD, sino también se va convirtiendo en la esperanza blanca de los empresarios de hueso colorado de la línea conservadora pero progresista, un fenómeno tan curioso que generamos en el país para perfilar un nuevo producto que pueda llevar a la Presidencia a una figura independiente.

La renuncia de Jorge Castañeda a favor de Ríos Piter, naturalmente tiene un precio, sólo ellos sabrán cuál fue, pero lo que sí tengo claro es que lo de Piter es el equivalente a la caída de San Pablo en su caballo camino de Damasco, aunque en este caso más bien iba camino al ITAM.

Esta no es una broma y tampoco una operación improvisada, fracasará o tendrá éxito, pero lo que sí les puedo asegurar es que tendrá todo el respaldo de las grandes empresas mexicanas. Porque de no ser así, créanme, el excanciller nunca hubiera renunciado.

¿Y ahora qué sigue? ¿Cuál es la ideología? ¿En qué se parece Ríos Piter a Macron? Porque es evidente que no se parece a Trump y tampoco a Berlusconi. Es cierto que el nombre “Emmanuelle” suena diferente para todos aquellos que vivieron en los años 70, y es que la película francesa llamada así significó el despertar erótico de toda una generación.

Ahora, este otro Emmanuel, el de apellido Macron –en este caso un hombre– también ha despertado el erotismo al demostrar que con una candidatura independiente, siendo un banquero de éxito, intelectual de éxito, ministro de Economía de éxito de un fracasado como Fraçois Hollande, pudo llegar a la Presidencia de la República francesa sin haberse presentado siquiera a la elección de la comunidad en la que vive.

En ese sentido, Ríos Piter es un político experimentado puesto que él sí se ha involucrado en procesos electorales. Aunque lo importante no es saber si Piter dará o no el ancho, lo importante es preguntarse, dada la característica tan profesional que tiene esta operación, ¿quiénes la acompañan? ¿Cuál es el programa? ¿Qué esperan? ¿Qué vamos a ganar? ¿Qué van a hacer?

Pero, además, hay que considerar que antes las presidencias se ganaban desde las televisiones, y ahora se ganan desde el grito y el aullido de las redes sociales.

Las preguntas son claras: ¿con qué elemento, además de representar un movimiento independiente, podría ganar Ríos Piter? ¿Contra quién va a competir, contra López Obrador, contra el candidato del PRI sea quien sea, contra Ricardo Anaya? ¿En qué radicará la diferencia, en haberse convertido fuera de los partidos al caerse del caballo?

Twitter @antonio_navalon