La irónica oferta de asilo político de Vladimir Putin a James Comey
Vladimir Putin ofreció asilo político al exdirector del FBI, James Comey. Lo cierto es que este gesto tuvo mucho de ironía. Con él quiso desacreditar la posición de Comey equiparándola a la de Edward Snowden, antiguo empleado de la Agencia de Seguridad Nacional que reveló o filtró información delicada a los medios. En lo que a la trama rusa en Washington respecta, en el gran tribunal de la opinión pública quien está en el banquillo de los acusados no es James Comey, sino el presidente Donald Trump.
Putin en todo caso a quien tendría que haberle ofrecido asilo político es al propio Trump. James Comey, sabedor de que era probable que el presidente lo presionara para suspender la investigación de sus vínculos con Rusia, simplemente quiso asegurarse de contar con pruebas de esa presión directamente ejercida por el mandatario con el objeto de que no se diera una situación en la que sólo estuvieran sobre la mesa la palabra de Comey contra la palabra de Trump.
Putin, por otra parte, dice que Estados Unidos interviene y con holgura en las elecciones rusas como queriendo justificar una probable intervención de Rusia en las elecciones de Estados Unidos. Lo que no puntualiza Putin es que hoy por hoy, en Rusia las elecciones son puramente cosméticas. Son de adorno pues. Rusia no es una democracia, sino un régimen autocrático, en cambio, la Unión Americana, imperfecta y como se quiera pero sí es una democracia, cualidad que explica tanto el hecho de que alguien con la estatura intelectual de Trump haya llegado a la Casa Blanca, como el hecho de que Trump esté teniendo problemas con el Congreso y James Comey por las investigaciones de sus conexiones con Rusia. Eso es lo que tenemos hasta hoy pero el escándalo continuará.
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