Las fechas fatales

 

Las precampañas ya son campañas


Realmente cada generación, cada candidato, cada época, tiene derecho a marcar con su huella deleble o indeleble, su propio paso por la historia.

Hasta este momento, la jornada de precandidaturas era un tiempo donde cada elegido de las diferentes estructuras partidistas se dedicaba a mostrarse, pasearse, tocar manos, tomarse selfies y besar niños.

Pero lo que correspondía a la estructura de la campaña como tal, daba inicio, no de acuerdo al tiempo legal, sino un poco más adelante cuando ya se había hecho el entrenamiento de los distintos candidatos.

Sin embargo ahora, en la era del Twitter, no hay nada que entrenar, o nacen entrenados y le aciertan a la primera, o simplemente desaparecen.

Las precampañas ya son campañas, y por el proceso que llevamos, todo apunta a que nos conduciremos hacia un camino donde cada fecha del día a día, de aquí hasta que lleguemos al 1° de julio, será definitoria.

¿Quién llegará? ¿Quién será al final el candidato de cada partido? Porque parece claro que, por una parte, ya hay un señor que se frota las manos y cree contar con mucha suerte al tener unos contrincantes tan jovencitos, tan nice, tan fifís.

Y es que a López Obrador, le están haciendo la campaña, no sólo porque va avanzando en las encuestas a lomos del caballo de Hacienda, que ahora está enfrentando demandas graves desde Chihuahua, sino porque además ese destrozo sistémico entre los dos partidos que representan o encarnan lo que él denomina como “la mafia del poder”, es decir, el PRI y el PAN, está contribuyendo a su favor.

Mientras ellos se destruyen, él se oye a sí mismo, pone cara de que escucha a los demás y sigue creciendo aunque no tenga claro hacia dónde.

Pero lo que sí ha quedado claro en esta precampaña es que se pueden utilizar todos los doctorados y las maestrías de diferentes especialidades; pero que la madurez como pasa en el amor, en la salud y en la vida, es algo que no consigues en ningún lugar, simplemente llega cuando tiene que llegar.

En ese sentido, el panorama actual está poniendo en evidencia la inmadurez de los jugadores. Algunos tienen derecho, hasta por su falta de experiencia, de ser inmaduros, pero otros no, sobre todo cuando llevan casi un tercio de su vida tomando decisiones que afectan al conjunto nacional.

Ahora, el coordinador de campaña de Andrés Manuel López Obrador no es el que él haya designado, porque lo que realmente la coordina es la impericia del PRI y del PAN.

@antonio_navalon