“No hay peor enemigo de lo mexicano, que los mexicanos”

 

Brady mientras festejaba el triunfo del Super Bowl 51 fue víctima de un caco


Cuando el mundo debate sobre las prácticas discriminatorias, racistas y xenófobas de Trump contra Latinoamérica, y en particular contra México, un ladrón nos exhibe, nos lleva entre sus tramposas patas.

Millones que piensan igual que el hombre más poderoso del planeta poseen un argumento más: un alto directivo de una organización periodística mexicana, el pasado 5 de febrero se robó el jersey del quaterbark de los Patriotas. Tom Brady mientras festejaba el triunfo del Super Bowl 51 en el NRG Stadium, fue víctima de un caco: Mauricio Ortega Camberos.

Aprovechándose de su posición en la OEM –de Paquita viuda de Vázquez Raña– acudió al encuentro deportivo. Vale la pena destacar que ese privilegio le correspondía al especialista deportivo y no al jefe. Desde ahí ya existía una conducta indebida.

Falta escuchar la versión del periodista, pero que nadie dude que su hurto servirá de inspiración para tuitear algo desde la Casa Blanca. ¿Cómo nos defendemos de esta vergüenza de talla internacional? ¿Cómo nos lavamos la cara ante el abuso del comunicador acreditado y fotocredencializado?

Gracias a Mauricio somos motivo de burla en todos los telediarios estadounidenses, noticieros radiofónicos y estamos en primera plana de casi todos los diarios del mundo. Y claro, los moneros aprovechan para dibujar muros más altos y prohibirnos la entrada a los reporteros mexicanos para cubrir acontecimientos noticiosos.

En fin, gracias Mauricio, tu asalto pone en muy alto el nombre de México: en el medallero de la transa y el cochupo. No cabe duda –como dice el gran León Krauze– que “esta historia demuestra que no hay peor enemigo de los mexicanos, que los mexicanos.”

Con Valor y Con Verdad.- Hace bien, mi otra casa de trabajo (a través de un comunicado) al ofrecer una disculpa pública a nuestros lectores y a la sociedad mexicana por estos lamentables hechos.