Renegociar el TLCAN. Para EU, America First

 

El gobierno de Donald Trump busca obtener de un TLCAN renegociado


La Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos dio a conocer antier su Sumario de Objetivos para la Renegociación del TLCAN (Summary of Objectives for the NAFTA Renegotiation).

El documento de 17 páginas solamente anota lo que el gobierno de Donald Trump busca obtener de un TLCAN renegociado, sin entrar en mayor detalle.

En la introducción se anota que “El nuevo TLCAN debe seguir rompiendo las barreras a las exportaciones estadounidenses. Esto incluye la eliminación de los subsidios injustos, las prácticas de las empresas estatales que distorsionan el mercado y las restricciones onerosas a la propiedad intelectual. El nuevo TLCAN será un acuerdo más justo que eliminará los persistentes desequilibrios comerciales de Estados Unidos en Norteamérica.

Garantizará que Estados Unidos obtenga un acceso a un mercado más abierto, equitativo, seguro y recíproco y que nuestro acuerdo comercial con nuestros dos principales mercados de exportación se aplique y obedezca efectivamente”.

En el documento no se anotan ni una sola vez los nombres de México y Canadá, los dos países que junto con Estados Unidos suscriben el TLCAN, y solamente una vez aparecen las palabras mexican y canadian. Las que sí abundan son las alusiones a Estados Unidos, ya que America o United States aparecen 13 veces, mientras que american, refiriéndose a lo estadounidense o a los estadounidenses, se anota 12. Para Trump, la renegociación tiene como objetivo primordial beneficiar a Estados Unidos antes que a nuestro país o Canadá.

America First, a final de cuentas.

Estados Unidos busca restringir el monto de los insumos importados a Norteamérica que se usan para elaborar bienes terminados que se benefician con las reglas de origen y eliminar el mecanismo para dirimir controversias relacionadas con las cuotas antidumping y compensatorias.

Algunos de los objetivos parecen haber sido copiados del Acuerdo Transpacífico al que Trump se opuso, especialmente en lo que tiene que ver con las medidas para regular el trato a los trabajadores, el medio ambiente y las empresas estatales.

Estados Unidos pretende que se establezcan reglas que rijan el comercio de servicios, las telecomunicaciones, la asesoría financiera, y los bienes digitales como la música y los libros electrónicos.

Refiriéndose al sector energético, el documento sólo señala como objetivo “Preservar y fortalecer las inversiones, el acceso a los mercados y las disciplinas de las empresas estatales que beneficien a la producción y transmisión de energía y respalden la seguridad e independencia energéticas de América del Norte, al tiempo que promueven reformas continuas de apertura del mercado de la energía”.

Ya quedó claro qué busca Estados Unidos. Ahora habrá que ver la manera en que México renegociará para proteger los intereses de nuestro país.

¡Qué gran responsabilidad tienen en sus manos los secretarios de Economía y Relaciones Exteriores, Ildefonso Guajardo y Luis Videgaray, respectivamente!

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Eduardo J Ruiz-Healy

@ruizhealy