Semana de tensión electoral

 

La Fepade ya tiene más de 658 denuncias previas a los comicios


De cara a las elecciones del proximo domingo para gobernador en Coahuila, Nayarit, Estado de México y más de 228 presidencias municipales en Veracruz, esta semana será, sin duda, de acusaciones, revelaciones y tensión antes del domingo 4 de junio.

Por lo pronto, la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Electorales (Fepade), que ya tiene más de 658 denuncias previas a los comicios, desplegó personal en los estados donde habrá elecciones, informó el titular Santiago Nieto.

El funcionario agregó que, del total de denuncias ya en investigación, más de la mitad son de Veracruz, 246 en el Estado de México, 50 en Coahuila y 32 en Nayarit.

El objetivo es acercar a los Ministerios Públicos Federales a la ciudadanía que desee interponer denuncias por posibles conductas susceptibles de delitos electorales.

Nieto explicó que el despliegue del personal ministerial se realizó en las distintas ciudades de las cuatro entidades, para atender de primera mano las denuncias que se han presentado.

El sistema de denuncia telefónica Fepadetel de la dependencia federal ha recibido 574 llamadas, y en el sistema de denuncia por Internet, Fepadenet, 748 correos de denuncia o solicitudes de orientación sobre el proceso electoral, agrego la dependencia.

32 AÑOS DEL ASESINATO DE BUENDÍA

Se han cumplido 32 años del asesinato de Manuel Buendía Tellezgirón a manos del exagente de la DFS Rafael Moro Ávila, y del autor intelectual Raúl Zorrilla, director de la desaparecida Dirección Federal de Seguridad. Pese a que Zorrilla y Buendía eran compadres, el autor de la columna Red Privada sentenció a Zorrilla que habría de publicar los nexos del funcionario de la DFS con el narco, motivo por el cual tomó la decisión de mandarlo a asesinar.

Ambos ya salieron de prisión, pero fue el primer asesinato de un periodista en donde se detuvo al autor material y al intelectual, siendo el procurador general de Justicia, el licenciado Ignacio Morales Lechuga, quien personalmente detuvo a Zorrilla. Fue en el interior de una casa de la colonia Lomas de Chapultepec, en donde Zorrilla citó al procurador que ya lo tenia ubicado. Al llegar Morales Lechuga, le ordenó quitarse la ropa para comprobar que no iba armado y lo esperó en un primer piso de la casa con una escopeta doble calibre .12.

Y una pistola calibre 9 milímetros con 15 tiros en el cargador. Morales Lechuga le indicó a Zorrilla que se entregara y todavía el entonces director de la Federal de Seguridad respondió que él no tenía problema alguno. “Que me manden de embajador de México en el Reino Unido y asunto arreglado”. Todo terminó en la sentencia de 30 años para cada uno.