Eliminar el fuero, una medida “taquillera”

En 2005, los seguidores de López Obrador tenían un lema: “no al desafuero”. Les parecía muy bueno el fuero para proteger a alguien de una inquisición política.

En México, es cierto que el fuero nos indigna mucho, porque es de los países que peor lo regulan en el mundo. Pero la solución no era eliminarlo, sino modificar esas reglas.

El fuero bien entendido (como en las mejores constituciones del mundo) es una vacuna contra la dictadura. Es un elemento esencial de un “sistema inmunológico” para evitar el desequilibrio de poderes.

Ojalá que no tengamos que esperar el momento cuando llegue un sátrapa en México y se aproveche de esa desprotección que ahora han aprobado los diputados, en caso de concretarse. Es una medida taquillera, es una medida que suena muy bonito, pero es tan bananero el pésimo fuero que hemos tenido regulado en México, como su eliminación.