Latente nuevo ataque en escuelas, advierten

El menor que disparó contra su maestra y compañeros para después suicidarse en una escuela privada de Monterrey, Nuevo León, rompió la barrera de las formas tradicionales en que los menores mexicanos usaban las armas, lo cual podría replicarse en otros planteles del país si no se atienden los focos rojos que muestran los estudiantes en su comportamiento, alertó Nelia Tello, experta de la UNAM en temas de violencia en jóvenes.

Dijo que lo más preocupante se debe a la réplica del comportamiento de estudiantes de Estados Unidos, donde se han registrado masacres perpetradas por estudiantes dentro de las escuelas.

“Antes los niños, si traían armas, era para presumirlas con los compañeros, ahora las disparan”, y detalló que un elemento de alarma pueden ser los estudiantes que cambian constantemente de escuela, porque son objeto de exclusión en todos los planteles, lo cual genera elementos que los puedan llevar a la depresión y a ejecutar este tipo de actos.

Señaló que, de acuerdo con los estudios que ha llevado a cabo, cada vez hay menos niños viviendo con sus padres: mientras que 64 por ciento de las familias son completas, hay 22 por ciento de menores que vive sólo con su madre, 10 vive en familias extendidas, y cuatro con ninguno de los padres.

No todos los menores responden de igual modo: “emocionalmente no les está dando su formación para responder de otra manera, sólo les da para enfrentar al mundo”.

Una de las razones por las que un niño puede ser violento es que desde casa se le reprime, agregó la académica.