El retorno de un clásico

 

Llega a la cartelera Blade Runner 2049, secuela del clásico de ciencia ficción de Ridley Scott


Cuenta el cineasta Ridley Scott que el momento exacto en que supo que su película Blade Runner había dejado de ser una simple cinta de ciencia ficción para convertirse en una historia de culto que tocaba las fibras más sensibles de los espectadores, fue una tarde cuando le llamó a su casa el músico Bob Dylan, a quien ni siquiera conocía personalmente, para felicitarlo y decirle que estaba cautivado con su trabajo.

“Aunque las primeras críticas hacia la película no eran favorables, y los resultados en taquilla tampoco hacían felices a los ejecutivos de los estudios Warner, en el fondo yo sabía que habíamos logrado llegar al siguiente nivel en cuanto a narrativa y estética visual, pero no al grado de pensar que habría secuelas ni de que la gente siguiera hablando de ella varias décadas después”, recuerda Scott en una entrevista con el diario New York Times, a propósito del estreno de Blade Runner 2049, la esperada secuela de la icónica película futurista de 1982.

El tiempo terminaría por darle la razón a Ridley Scott, su filme de replicantes (androides) que buscan respuestas al sentido de la vida y un conflictuado blade runner (policía cazador de replicantes), interpretado por Harrison Ford, ahora es considerado una obra maestra del Séptimo Arte.

Blade Runner 2049 se sitúa 30 años después de la primera y nos cuenta la historia de K (Ryan Gosling) un joven blade runner que busca a una nueva generación de replicantes y se encuentra con un misterio de androides asesinos en el que está involucrado un poderoso y megalómano empresario con complejo de Dios (Jared Leto).

En esta nueva entrega Harrison Ford está de vuelta como Rick Deckard, lo mismo que Ridley Scott como productor ejecutivo, quien desarrolló, junto con los guionistas Hampton Fancher y Michael Green, la historia de la secuela. La dirección de Blade Runner 2049 está a cargo del cineasta canadiense Denis Villeneuve, pues Scott no pudo hacerlo ya que estaba ocupado con Alien: Covenant, la más reciente entrega de la saga que él mismo puso en marcha en 1979.

Resulta evidente que Blade Runner 2049 intenta rendirle honores a la versión original, pero al mismo tiempo quiere librarse de su sombra. Según algunos críticos, Villeneuve lo ha logrado, pero sin alcanzar el nivel poético de su predecesora. Desde las primeras tomas aéreas de un paisaje agrícola desnaturalizado, hasta la confrontación letal que le sigue, queda claro que presenciamos a un estratega visual con maestría y a un cuentista muy astuto. Pero tiene frente a él un tótem venerado por el mundo entero.

“Me arrepentí mil veces de haber aceptado dirigir la secuela de Blade Runner, pero llegó un momento en el que hice las paces con la idea de que las posibilidades de tener éxito eran mínimas. Sabes que hagas lo que hagas va a ser comparado con la película original y, entonces, te das cuenta de que has perdido. No se puede superar esa obra maestra. Desde ese instante todo empezó a ir bien. Lo único que tenía que dejar claro es que realmente amo esa película y no debía intentar pelear contra ella. Mi película es un acto de amor al cine”, le dijo Villeneuve al diario El Mundo, durante la promoción de la película en España.

A pesar de que en la original se asomaba al abismo de la soledad, en esta continuación hay menos personajes y más incomunicación. “Los blade runner ahora son parias, realizan un trabajo que nadie quiere afrontar. Mi personaje lleva una existencia solitaria, sin conexiones humanas”, señala Ryan Gosling, el protagonista, en declaraciones para la cadena BBC.

El actor agrega que, así como en la primera entrega, Blade Runner 2049 “indaga en la imagen hipersexuada de la mujer, de lo que significa pertenecer o no a un grupo, la falta de empatía. Aquí el planeta y la humanidad han sufrido terribles transformaciones… y lo curioso es que cuando la película termina, uno siente que está hablando de lo que pasa hoy en día”.