Los niños invisibles, hijos de mamá sin libertad

 

Cuando el futuro del país se encuentra tras las rejas


Si el Sistema Penitenciario acusa graves fallas documentadas por organizaciones civiles y organismos defensores de derechos humanos, uno de los problemas más serios y poco atendidos es el que tiene que ver con los cientos de niños que nacen y viven junto a mamá, dentro de las cárceles.

En México hay casi 13 mil mujeres viviendo en prisión y la mayoría son madres, aunque sus hijos viven fuera del seno materno en la mayor parte de los casos. Sin embargo, la organización no gubernamental Reinserta estima que hay unos 500 pequeños viviendo con mamá dentro de la cárcel.

“Desde el punto de vista jurídico, el interés superior del menor debe prevalecer por encima del derecho penal, y esto significa que la creación de mecanismos y condiciones tendientes a promover los derechos de las niñas y niños deben ser prioridad para el Sistema Penitenciario”, advierte la ONG en un diagnóstico que llevó a cabo en las prisiones nacionales.

Y la peor cárcel de México está en…

Los menores nacen y viven en cárceles donde existe violencia, abuso y consumo de drogas. “Se trata de niñas y niños que presencian constantemente comportamientos sexuales explícitos y que experimentan situaciones traumáticas por el simple hecho de haber nacido en prisión. Estas experiencias son perjudiciales para su desarrollo físico, emocional y mental, lo que puede tener consecuencias negativas al normalizar la violencia y el crimen, a corto y largo plazo”, añade.

Dado que estos pequeños no forman parte de ningún presupuesto, sus necesidades básicas no están cubiertas y sus derechos humanos son constantemente vulnerados.

Es por esta rezón que Reinserta lanzó una exigencia a las autoridades, gobernantes y a los cinco candidatos presidenciales, para que se comprometan a respetar los derechos humanos de los #NiñosInvisibles que viven en la cárcel y a generar las condiciones óptimas para que la prisión no sea una limitante en su desarrollo y bienestar.

Viven en desigualdad más de 20 millones de niños en México

Su proyecto, que pretende reunir firmas de apoyo a través de la plataforma change.org, busca que niñas y niños no pasen su primera infancia en las cárceles.

Y aunque en el 2015 Reinserta promovió en la Ley de Ejecución Penal el reconocimiento de las niñas y los niños de 0 a 3 años que nacen y viven en las cárceles, así como la obligación de los estados y el Gobierno Federal por respetar sus derechos y asegurar que crezcan y se desarrollen en un ambiente libre de violencia, esta realidad aún está lejos.

“Como sociedad hemos fallado. Tenemos cárceles disfuncionales que perjudican a cientos de niñas y niños. Apostar por la infancia de un país es apostar por un mejor futuro”, advierte la ONG en su petición, en la cual pregunta: ¿Cuál es el rumbo de un país que tiene a su futuro tras las rejas?

dgp