Matanzas en Atlanta podrían ser por “adicción sexual”

Atlanta Foto: AP
Atlanta Foto: AP 

Robert Aaron Long, de 21 años, fue acusado formalmente el miércoles de cuatro cargos de asesinato y un cargo de agresión, indicó la policía.


ATLANTA (AP) — Un hombre blanco acusado de matar a ocho personas, la mayoría de ellas de ascendencia asiática, en salas de masajes en la zona de Atlanta relató a la policía que los crímenes no eran por racismo sino posiblemente por su “adicción sexual”, informaron autoridades el miércoles.

Robert Aaron Long, de 21 años, fue acusado formalmente el miércoles de cuatro cargos de asesinato y un cargo de agresión, indicó la policía.

Aun así las autoridades siguen investigando si los ataques fueron por razones de odio racial, en medio de una ola de ataques contra gente de etnia asiática en Estados Unidos. Seis de las víctimas eran de ascendencia asiática y siete eran mujeres.

No quedaba claro si Long llegó a ir a las salas de masajes donde ocurrieron los ataques; una fuente oficial dijo que sí, pero otro indicó que al parecer sólo visitó locales similares. Las autoridades afirmaron además que el individuo deseaba viajar a Florida para atacar “algún tipo de negocio pornográfico”.

“Al parecer tiene un problema que él considera una adicción sexual, y considera que ese tipo de lugares lo tientan y él deseaba eliminar esa tentación”, afirmó el portavoz del departamento policial del condado Cherokee, capitán Jay Baker.

Ante la pregunta de si las salas de masajes eran lugares donde la gente iba para mantener relaciones sexuales, la alcaldesa de Atlanta Keisha Lance Bottoms se negó a responder, afirmando que no era apropiado “echarle la culpa a las víctimas”.

El jefe policial Frank Reynolds señaló que es demasiado pronto como para decir si el motivo de los crímenes era el racismo, pero “los indicios en este momento apuntan a que al parecer no lo era”.

Fue la sexta matanza colectiva en Estados Unidos en lo que va de año, y la más mortífera desde la de agosto del 2019 en Dayton, donde murieron nueve personas, según una base de datos recopilada por la AP, USA Today y la Universidad Northeastern. Ocurre tras un período en el 2020 que, durante la pandemia del coronavirus, tuvo la menor cantidad de matanzas en una década. La base de datos define como matanzas todo suceso en que hay cuatro o más muertos excluyendo al asesino.

Muchos sospechosos en casos de violencia armada tienen antecedentes de rencor hacia las mujeres. Aun así, esta agresión estremeció a la comunidad asiática de Estados Unidos, a la luz de la reciente hostilidad hacia ellos en medio de la propagación del coronavirus. El virus fue identificado inicialmente en China y el anterior presidente Donald Trump y aliados suyos suelen calificarlo del “virus chino”.

La legisladora estatal de Georgia Bee Nguyen afirmó que los crímenes parecen estar “en la intersección entre la violencia de género, la misoginia y la xenofobia”.

Bottoms, la alcaldesa de Atlanta, expresó que sea cual fuere el motivo del crimen, “es inaceptable, es vil y debe cesar”.

Los ataques comenzaron alrededor de las 5 de la tarde, cuando cinco personas fueron baleadas en la sala Young’s Asian Massage Parlor, ubicado en un centro comercial cerca de una zona rural de Woodstock, unos 50 kilómetros (30 millas) al norte de Atlanta. Dos personas murieron en el lugar y otras tres fueron trasladadas al hospital, donde dos de ellas murieron.