Normales rurales, mantienen los mejores perfiles para la docencia

 

Por encima las del sector privado e incluso de la Escuela Nacional Pedagógica


Las normales rurales públicas cuentan con los mejores perfiles para el ejercicio de la docencia, por encima las del sector privado e incluso de la Escuela Nacional Pedagógica.

Lo anterior es parte de las conclusiones presentadas en el libro La Educación Normal en México. Elementos para su análisis, que presentó ayer el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE).

El estudio realizado con el fin de consolidar una base de datos referente para investigadores, describe que las escuelas normales no están formando suficientes docentes para la atención de los niños indígenas, además de que con el examen de ingreso al Servicio Profesional Docente, que hizo posible que cualquier profesionista pueda aspirar a ser maestro de educación básica con cero años de formación inicial pedagógica, se hace necesario acompañarlos para su preparación en el campo.

La investigación, meramente estadística, corrió a cargo de Verónica Medrano Camacho, Eduardo Ángeles Méndez y Miguel Morales Hernández, y en el documento se sientan las bases sobre la situación de las escuelas normales rurales en el país.

Para esto, se respondieron cuatro preguntas: ¿Cuáles han sido las principales acciones para la consolidación de la educación normal en México a partir de 1984?; ¿cuáles son las principales características de los planes de estudios para la formación de docentes de educación básica y de sus  normas de control escolar?; ¿cuál es la dimensión de la educación normal y cómo ha sido su evolución de 2000 a 2001 y de 2015 a 2016?; y ¿cuáles son las características de los alumnos y docentes adscritos a estas instituciones?

Entre los resultados encontrados por el equipo de investigadores, que ya pueden ser consultados en línea en el sitio http://www.inee.edu.mx/images/stories/2018/comunicados/educacion-normal2018.pdf, destaca que desde hace 30 años existe una alta centralización en la toma de decisiones, con lo cual las normales están imposibilitadas para construir su propio proyecto académico, atendiendo las necesidades de sus alumnos, por lo que se debilitó sus trayecto formativo y sus cuerpos académicos.

Medrano Camacho detalló en conferencia que las normales rurales públicas cuentan con los mejores perfiles para el ejercicio de la docencia, por sobre aquellas del sector privado e incluso de la Escuela Nacional Pedagógica.

En cuando a las licenciaturas, el documento precisa que, mientras hay una gran demanda para cursar educación primaria –más de 36 mil alumnos matriculados– en las áreas de educación artística o especialidad motriz o visual no pasan de 600 los inscritos.

Asimismo, se destaca que en cuanto a las normas que regulan la titulación en las normales, se encontró que la alta cantidad de titulados no es precisamente un indicador de éxito escolar, sino que se debe a la entrada de modalidades de titulación, como el trabajo profesional o el portafolio.
Aunado a ello, se encontró que las rurales tienen los mismos problemas que las instituciones de educación superior: problemas de financiamiento, falta de correspondencia entre la oferta educativa y las necesidades sociales, problemas con la calidad educativa que brindan e inadecuada de los estudiantes por licenciatura.