Hoy se cumplen 39 años de la muerte de Bob Marley

Nacido el 6 de febrero de 1945 en Saint Ann, Jamaica, Robert Nesta Marley formó su primera banda musical (The Rudeboys) mientras trabajaba como soldador en Kingston. Fueron sus mezclas de ritmos provenientes del folclor caribeño, rock, blues y soul combinados con una peculiar impronta lo que cautivó de lleno al público.

Pese al tiempo transcurrido, aún hoy muchas personas desconocen cómo murió Bob Marley. ¿Cuál fue el verdadero motivo de tan abrupto desenlace? Diversos mitos urbanos no hacen más que agigantar su figura, eternamente joven.

Al asociarlo con la marihuana y la cultura rastafari, existe una falsa creencia difundida de vincular su fallecimiento a un acto de sobredosis. Otros prefieren respaldar versiones más insólitas que hablan de un asesinato encubierto por presiones políticas. Aunque las circunstancias reales sobre cómo murió Bob Marley distan de tales conjeturas.

De hecho, el causante fue un tumor que afecta, curiosamente, sobre todo a gente de piel blanca. Sin dudas, una desafortunada herencia genética, considerando que el cantante jamaiquino era mestizo. “No vivas para que tu presencia se note, sino para que tu ausencia se sienta” solía presagiar en sus citas.

Para saber cómo murió Bob Marley hay que retrotraerse a una lesión ocurrida durante un partido de fútbol de 1977. Amante de este deporte, el autor de “Redemption Song” tenía la costumbre de organizar encuentros con los periodistas en cada ciudad europea que visitaba por sus presentaciones.

Luego de recibir un pisotón en el pie derecho, comenzó a sentir fuertes dolores en el dedo gordo, donde también había perdido la uña. El diagnóstico clínico no fue el esperado: melanoma maligno. Los médicos le aconsejaron amputar dicha extremidad, pero el músico se negó rotundamente.

“Todo hombre tiene derecho a decidir su propio destino” rezaba en su canción llamada Zimbabwe. Y esta filosofía profesada permite comprender cómo murió Bob Marley, ya que los rastas deben mantener su cuerpo intacto. Aunque realizó otros procedimientos avalados por su religión, no fueron suficientes para evitar un lamentable final.

Fue entonces cuando comenzó una frenética huida hacia adelante. Después de una gira de verano exitosa en el viejo continente, el artista viajó a los Estados Unidos donde tenía programada una serie de conciertos en el mítico Madison Square Garden. Mientras se encontraba haciendo footing en Nueva York, cayó desplomado echando espuma por la boca.

Tras ser trasladado al hospital, descubrieron que el cáncer se había diseminado a los órganos vitales. Los registros sanitarios acerca de cómo murió Bob Marley apuntan a una metástasis en cerebro, pulmones, hígado y estómago. A pesar de no darle más de unas pocas semanas de vida, el show debía continuar.

“Nos pasamos la vida esperando que pase algo y lo único que pasa es la vida” afirmaba en su ponderación del presente. Tres días después, el 23 de septiembre de 1980, tocaba en el teatro Stanley de Pittsburgh, siendo su última actuación. El estado de salud del cantante empeoraba notablemente y a pasos agigantados.

A comienzos del año 1981, el panorama proyectado era desalentador. Los tratamientos habían sido infructuosos, mostrando a un Bob irreconocible: delgado al extremo, sin pelo ni fuerzas para poder carraspear siquiera su guitarra acústica. Ante una despedida inminente, su entorno familiar decidió que regrese a su país.

Sin embargo, en pleno trayecto sufrió un shock que obligó a desviar el vuelo de urgencia hacia Miami. Finalmente, su corazón dijo basta en el Hospital Cedros del Líbano. Aquella mañana del 11 de mayo de 1981 tenía tan solo 36 años. “El dinero no puede comprar la vida” le remarcaba con razón a su hijo Ziggy.