Inteligencia artificial en la vida cotidiana

Tecnología Foto: Internet
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Monreal Ávila, dijo que las ciencias marcan el crecimiento y desarrollo de los ámbitos: social, político, económico y cultural de nuestras vidas.


El senador Ricardo Monreal Ávila reconoció que la vida moderna está impregnada de los avances de la ciencia y la tecnología que, sutil y discretamente, forma parte de nuestra vida cotidiana que, para bien, es un fuerte apoyo al desarrollo de medicamentos necesarios para la salud de la humanidad.

Ayer, el también presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Senado sorprendió con el anuncio de la iniciativa de reformas a la ley federal del trabajo, para que los empleados, obreros y trabajadores puedan ser disfrutar de una mejor manera de su tiempo libre; hoy, reconoció que, incluso la tecnología, forma parte de nuestro tiempo libre.

Acompañado de la priísta Beatriz Paredes, quien preside la Comisión de Ciencia y Tecnología, Monreal Ávila dijo que las ciencias marcan el crecimiento y desarrollo de los ámbitos: social, político, económico y cultural de nuestras vidas.

Durante la inauguración del Foro “Un acercamiento a la inteligencia artificial”, efectuado en la Secretaría de Relaciones Exteriores, el presidente de la Jucopo señaló que en el sector salud, la ciencia y tecnología han permitido el desarrollo de fármacos, pasando por la interpretación de imágenes médicas para evitar y prevenir enfermedades, tumores o malformaciones, detectar tempranamente el cáncer y hasta el análisis que genera en un paciente el uso de tóxicos.

Está vinculada de manera cada vez más íntima a nuestra vida cotidiana, de una forma tan sutil como invasiva a la privacidad, debido a que permite que hoy sean tan comunes algunas prácticas, como el reconocimiento facial, el desbloqueo telefónico con datos geométricos, el disfrute de servicios musicales o programas basados en algoritmos de gustos del usuario, entre otros, manifestó.

El legislador zacatecano puntualizó que el tema de la Inteligencia Artificial alcanza objetivos cada vez más ambiciosos, pues no se agota en la demanda social o la garantía del derecho al trabajo o el derecho al acceso a la educación, sino que se le suman temas como la emisión genética, la clonación, la digitalización de la moneda, los compromisos que protegen al medio ambiente y otros temas que parecen intangibles pero que, sin duda, tienen gran repercusión de lo cotidiano.