Ludwig van Beethoven murió 26 de marzo de 1827

The identity of Ludwig van Beethoven’s “immortal beloved,” who received a plethora of letters from the composer in 1812, is still a mystery, but historians believe it was Antonie Brentano, a diplomat’s daughter. Beethoven dedicated his Diabelli Variations Op. 120 to her, and in one of his letters found after his death, he famously wrote: “Though still in bed, my thoughts go out to you, my Immortal Beloved, Be calm–love me–today–yesterday–what tearful longings for you–you–you–my life–my all–farewell. Oh continue to love me–never misjudge the most faithful heart of your beloved. Ever thine. Ever mine. Ever ours.” 

Miembro de Real Academia de Artes y Ciencias de los Países Bajos


Ludwig van Beethoven fue un compositor, director de orquesta y virtuoso pianista alemán. Su legado musical abarca, cronológicamente, desde el Clasicismo hasta los inicios del Romanticismo. Es considerado uno de los compositores más importantes de la historia de la música y su legado ha influido de forma decisiva en la evolución posterior de este arte.

Siendo el último gran representante del clasicismo vienés (después de Christoph Willibald Gluck, Joseph Haydn y Wolfgang Amadeus Mozart), Beethoven consiguió hacer trascender la música del Romanticismo, influyendo en diversidad de obras musicales del siglo XIX. Su arte se expresó en numerosos géneros y aunque las sinfonías fueron la fuente principal de su popularidad internacional, su impacto resultó ser principalmente significativo en sus obras para piano y música de cámara.

Beethoven pasó los últimos años de su vida casi totalmente aislado por la sordera, relacionándose solamente con algunos de sus amigos a través de los «cuadernos de conversación», que le sirvieron como medio de comunicación. Su último gran éxito fue la Novena sinfonía, terminada en 1823. En los tres años finales, se dedicó a componer cuartetos de cuerda y la Missa Solemnis.

Beethoven recibe la extremaunción y la comunión según el rito católico. Cabe señalar que las creencias personales de Beethoven fueron muy poco ortodoxas. Esa misma tarde entra en coma para no volver a despertar hasta dos días más tarde.