Por qué no comprar heno ni musgo para tu nacimiento

 

Algo que tienes que saber es que cada año se extraen alrededor de 50 toneladas de musgo y otras tantas de heno.


Aunque durante muchos años ha sido tradición decorar los Nacimientos de Navidad con heno y musgo, es una práctica se tiene que cambiar por el bien de la naturaleza.

Algo que tienes que saber es que cada año se extraen alrededor de 50 toneladas de musgo y otras tantas de heno.

Su extracción casi siempre proviene de entornos naturales, por lo que cientos de hectáreas naturales quedan expuestas y se afecta, como daño colateral, a un sin fin de especies que usan a estas plantas para poder sobrevivir.

Tanto la extracción como la compra de estas especies está prohibida, informó la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).

La penalización por comercializar estas u otras especies protegidas va de uno a nueve años de prisión y de 300 a 3 000 días de multa.

El heno es una hierba delgada y de color grisáceo que nace y crece en las ramas de los árboles. Cuando llueve, esta planta ayuda a captar la humedad del ambiente y gracias a sus características físicas aumenta la humedad relativa de los bosques.

Por su parte, los musgos son pequeñas plantas que viven en diversos ambientes. Representan el segundo grupo de plantas verdes más importantes y podemos encontrarlos en montañas, selvas, zonas áridas y hasta en las plantas o en los árboles que están en las ciudades.

Así que, si aún no pones el Nacimiento, te recomendamos sustituir al heno y al musgo por aserrín natural o pintado.

KJ