A 20 el dólar, joven

 

Tal pareciera que entre más se recupera la economía estadounidense, más afectada se ve nuestra moneda


Estamos viviendo una nueva desestabilización monetaria, y lo que ya veíamos venir pero rogábamos que no llegar, es una paridad cambiaria que se acerca cada vez más a los 20 pesos mexicanos por dólar. Ante tal escenario, las autoridades encargadas de la política monetaria han decidido prepararse para intervenir.

La inestabilidad se empieza a dejar ver por el vuelo de los llamados capitales golondrinos, que huyen hacia instrumentos que les representan menos riesgo y hasta refugio, como ocurre siempre que aparecen ciclos de crisis.

Es así que el índice del dólar sube hasta el momento en que redactamos éste artículo un 0.49 por ciento frente a una canasta de seis divisas, lo que afecta bastante fuerte a nuestra moneda y las razones son diversas, porque los especialistas nos hablan de que ante sorpresivos resultados de las ventas minoristas con nuestro vecino del norte, se puede observar una fuerte mejoría en su economía.

Tal pareciera que entre más se recupera la economía estadounidense, más afectada se ve nuestra moneda, porque ahora con los datos que superan altamente sus expectativas, tanto del empleo como del consumo interno, el dólar se ha “recuperado” frente a otras divisas, principalmente de economías emergentes, como nuestro país.

Ahora hay diversos acontecimientos que expertos de bancos y financieros se esfuerzan por explicarnos y darles lógica como motivos, desde la posible salida del Brexit de la Unión Europea, la nueva reunión de la FED y hasta la posibilidad de que Trump se erija como primer mandatario de Estados Unidos, como el peor vaticinio para la economía mundial.

Para todos, menos por supuesto, para la aún primer potencia del mundo, al menos de primera vista. Además, China y su latente crisis, ya no parece ser la causa principal de la hecatombe financiera global y del aumento del dólar, sea de paso, ahora aparecen nuevos factores que despiertan si no la imaginación, si la especulación de los financieros.

Es muy cierto que en entorno globalizado como en el que vivimos, la coyuntura vigente depende de cualquier cambio o fenómeno que ocurra en cualquier país, afectando a otros por muy distantes que se encuentren, como si se tratase de una especie de “efecto mariposa”.

Pero también lo es que nuestras autoridades deben fomentar aún más el consumo interno, y prepararse para evitar el colapso de nuestra economía, pensando en que si de motivos para afectar la paridad cambiaria de México, hay que poner atención en la situación del precio y distribución del petróleo. Todo esto, para evitar posibles sorpresas.