AMLO no aceptó que se aplicara un impuesto especial a ricos como lo planteó Ramírez Cuéllar, revela Mauricio Merino

Mauricio Merino Foto: Internet
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Mauricio Merino destacó que la pandemia ha provocado la pérdida de la capacidad alimentaria para el 60% de la población, que por la pérdida de sus ingresos y empleo, tiene dificultades para comprar lo básico para sobrevivir.


El coordinador general de la iniciativa Nosotrxs, Mauricio Merino, informó que hubo un acuerdo verbal con el dirigente interino de Morena, Alfonso Ramírez Cuéllar, para que se aplicara el cobro de un impuesto especial a la riqueza para que ese dinero se destinara a la entrega de un ingreso mínimo vital de emergencia para apoyar a la gente que se ha visto afectada por la crisis económica y cuya propuesta es apoyada por prácticamente todos los grupos parlamentarios.

La propuesta era que se aplicara un impuesto del 2 por ciento a la población con mayores ingresos, sin embargo, indicó que el presidente Andrés Manuel López Obrador lo rechazó.

Al participar en la reunión plenaria virtual de los diputados federales y senadores del Partido de la Revolución Democrática (PRD), el también exconsejero electoral detalló que el dirigente interino morenista coincidió, fue la de aceptar el préstamo ofrecido por el Fondo Monetario Internacional (FMI) y pagarlo con el impuesto especial a la riqueza.

No obstante, la insistencia del Primer Mandatario de no acceder a crédito para sostener el discurso de que no se endeudará al país, pese a que la deuda sí se está incrementando, se convirtió en un freno.

“Hemos en Nosotrxs tenido conversaciones con el Consejo Coordinador Empresarial, incluso con Alfonso Ramírez Cuéllar también, de MORENA, ya hay un acuerdo por lo menos verbalizado, de que se puede establecer este gravamen especial de emergencia a las personas más ricas del país, para que con ese dinero se sufrague el préstamo de emergencia ofrecido ya, ya en la mano, por el FMI. Como el señor Presidente otra vez no quiere tomar más deuda, a pesar de que el país de todas maneras se está endeudando más, entonces parece que eso tampoco es viable”, expresó.

Lamentó que el Gobierno Federal y su mayoría en el Congreso estén perdiendo la oportunidad política de impulsar el ingreso de emergencia, pese al severo impacto de la emergencia sanitaria por COVID-19.

“Que no solamente se está perdiendo el tiempo, mientras se agravan las condiciones de vida cotidiana, la vida real, la de carne y hueso, de millones de personas que no tienen como allegarse este dinero para poder comprar lo fundamental, sino que también se está perdiendo una oportunidad política e ideológica, si me dejan ponerlo así, de izquierda”, remarcó.

Mauricio Merino destacó que la pandemia ha provocado la pérdida de la capacidad alimentaria para el 60 por ciento de la población, que por la pérdida de sus ingresos y empleo, tiene dificultades para comprar lo básico para sobrevivir.

Señaló que el ingreso mínimo vital no afecta ni choca con los “programas del Presidente de la República”, porque cubriría a la población que las pensiones y becas del Ejecutivo Federal no están beneficiando.

Dijo que hay distintas opciones para financiar el ingreso de emergencia, como hacer reasignaciones presupuestales, en especial de los recursos destinados a las grandes obras del Ejecutivo Federal.

En la plenaria perredista también participaron el académico Gustavo Leal, del Grupo de Estudios de Políticas Públicas en Seguridad Social de la UAM-Xochimilco; y el expresidente de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF), Mario Di Costanzo, quienes abordaron el tema de las pensiones y la propuesta del Presidente de la República, de incrementar la aportación de los patrones.

El planteamiento, coincidieron, no resolverá el problema de las pensiones, sino que dejará para después su solución.