Créditos contratados, en riesgo

 

Representará un golpe a la capacidad de pago


El incremento en la tasa de interés del Banco de México (Banxico) de 50 puntos base, ubicándola en 5.25, puede no significar mucho a los mexicanos comunes o de “a pie”, sin embargo, de acuerdo a los analistas económicos, representará un incremento a mediano y largo plazo en todos los créditos contratados en tasas variables o en las tarjetas de crédito, lo que sin duda representará un golpe a su bolsillo y capacidad de pago.

Las instituciones financieras, según el presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM), Luis Robles, “han absorbido el incremento dada la brutal competencia”, aunque reconoció que podría cambiar el año próximo, todo dependerá de la postura que adopte cada banco que decida absorber costos por clientes.

Al respecto en entrevista para CAPITAL MÉXICO, Mariana Ramírez, de Banco Ve por Más, reconoció que la familia común mexicana —dijo— “deberá estar atenta a por ejemplo el pago de la tarjeta de crédito, porque su Costo Anual Total (CAT) de financiamiento se podría elevar de manera proporcional al aumento de tasas; de igual manera estarían los créditos automotrices, “pero –otra vez– sólo en aquellos créditos con tasa fija y en proporción o menor medida del aumento anunciado por Banxico”.

En tanto los créditos hipotecarios “no tendrán problemas, ya que la mayoría están en tasa fija y son a largo plazo”.

Al respecto, Raúl Rodríguez, reconoció que el escenario más temido por las autoridades monetarias mexicanas se hizo realidad, ya que desde el triunfo de Donald Trump, “el peso continuó depreciándose, se incrementó la volatilidad en los mercados y, además el mercado de deuda gubernamental local comenzó a dar señales de falta de liquidez”.