Crímenes cibernéticos provocan pérdidas de 100 mil millones de dólares al año

 

De acuerdo con Christine Lagarde, directora gerente del Fondo Monetario Internacional, las pérdidas podrían ser más grandes, debido a que no se cuenta con medidas para prevenir este delito


Los atracos bancarios cambiaron de modalidad. Poco a poco las armas de fuego y los pasamontañas comienzan a ser sustituidos por complejos algoritmos y computadores configuradas de tal forma que logran ocultar su ubicación física. Los crímenes digitales son una realidad, y año con año dejan pérdidas millonarias en el mundo, las cuales podrían aumentar paulatinamente si no se toman las medidas de ciberseguridad necesarias para prevenirlos y combatirlos.

Christine Lagarde, directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), señaló que el riesgo cibernético representa una amenaza para a la estabilidad financiera global, ya que se estiman pérdidas anuales promedio equivalentes al nueve por ciento de los ingresos netos bancarios a nivel mundial; es decir, unos 100 mil millones de dólares (mmd).

“Un ciberataque exitoso puede tener consecuencias directas materiales a través de pérdidas financieras así como costos indirectos como el daño de la imagen”, alertó.

De acuerdo con Lagarde, dentro de un escenario severo, en el que la frecuencia de los ciberataques aumentra al doble, las pérdidas podrían ser de 2.5 a 3.5 veces más altas, lo que se traduciría en entre 270 a 350 mmd.

La vulnerabilidad, según dijo, aumenta por la  poca penetración del mercado asegurador para el riesgo cibernético. “La mayoría de las instituciones financieras ni siquiera tienen seguro cibernético. La cobertura es limitada y las aseguradoras enfrentan desafíos para evaluar los riesgos debido a la incertidumbre sobre las exposiciones cibernéticas, la falta de datos y los posibles efectos de contagio”, comentó la funcionaria.

Cabe recordar que, en México, a finales de abril se vivió un ataque cibernético dirigido al Sistema de Pagos Electrónicos Interbancarios (SPEI), el cual provocó retrasos en los depósitos bancarios realizados por esta modalidad, así como fallas generales en los sistemas de los bancos afectados, como Banorte, Citibanamex y BanBajío, entre otros.


De acuerdo con estimaciones del Banco de México, dicho ataque provocó pérdidas calculadas en 400 millones de pesos, los cuales no fueron sustraídos de las cuentas de los usuarios, y tuvieron que ser solventados por las instituciones financieras.
ODT