Elba Esther Gordillo gana juicio contra el SAT

 

El SAT acusó a Gordillo Morales, a finales de 2013, de no declarar ingresos por 7 millones 883 mil 606 pesos con 65 centavos, por lo que se hizo acreedora a multas y recargos.


Elba Esther Gordillo Morales, exlideresa del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE),  ganó al Servicio de Administración Tributaria (SAT) un juicio para no pagar más de 19 millones 323 mil pesos por Impuesto Sobre la Renta (ISR) correspondientes a los ejercicios fiscales 2008 y 2009.

El Tribunal Federal de Justicia Administrativa (TFJA) anuló la resolución del SAT respecto al crédito fiscal, debido al ejercicio de facultades discrecionales y de vicios de forma, pues no se otorgaron a Gordillo Morales las garantías para argumentar a su favor, según una nota del diario El Universal.

El SAT acusó a Gordillo Morales, a finales de 2013, de no declarar ingresos por 7 millones 883 mil 606 pesos con 65 centavos, por lo que se hizo acreedora a multas y recargos. Los supuestos ingresos que no declaró la exlideresa se habrían revelado mediante depósitos y pagos a tarjetas de crédito a su nombre tras hacer cuantiosas compras en tiendas de alta gama en Estados Unidos.

Los abogados de la exdirigente del SNTE sostuvieron que los pagos habían sido reembolsos del propio sindicato por gastos de representación provenientes de una partida especial que se destina a este concepto, así como a gastos de relaciones públicas derivados de la encomienda de Gordillo Morales como presidenta vitalicia.

Las sumas depositadas a las tarjetas de crédito fueron para cubrir los saldos por compra de artículos en centros comerciales y tiendas de la Unión Americana como Neiman Marcus, Christian Dior, Chanel, Roberto Cavalli, Guchi, Bulgari, Louis Vuitton, Salvatore Ferragamo y Giorgio Armani, entre otras firmas.

Los estados de cuenta también detallan pagos en hoteles cinco estrellas en Beverly Hills, estéticas de belleza como The Salon by Maxime en Rodeo Drive, del famoso estilista Maxime Salvador, que se precia de atender a celebridades de Hollywood, y en joyerías como Montblanc.