Envían sobras: UNA. Avicultores piden renegociar el TLCAN para mejoras en importación de pavo congelado

FILE – In this April 18, 2016, file photo, Tim the turkey, center, stands next to a cow at the Orange High School farm in Orange, Calif. Two college students have been sentenced for kidnapping the turkey that had to be euthanized this week, five months after being found reeking of beer with a broken toe. Steven Koressel and Richard Melbye were sentenced to one year of probation Thursday, Sept. 1, 2016, after pleading guilty to entering an animal enclosure without consent. (Sam Gangwer/The Orange County Register via AP, File) MANDATORY CREDIT 

Refieren que casi la mitad de la demanda nacional llega de EU


La renegociación del Tratado de Libre Comercio con América del Norte (TLCAN)  es esperada con ansias por parte de los avicultores del país, ya que eso frenaría las importaciones de pavo congelado y de mala calidad que envía Estados Unidos a territorio nacional, como sucederá esta Navidad y Año Nuevo donde acaparan  95 por ciento de las importaciones, aseguró Marco Parsons, presidente de la sección de guajolotes de la Unión Nacional de Avicultores (UNA).

Indicó que aunque para la temporada se estima se registrará una demanda de pavo de tres millones 200 mil unidades, lo que representa 200 mil más que en 2015, y que será cubierta por una producción nacional de un millón 500 mil, un crecimiento de uno por ciento y el resto será cubierto por importaciones de Estados Unidos, las cosas no han sido favorables para este ramo.

Precisó que no es el crecimiento que esperaban pero el tema de las importaciones les detuvo las ventas  por la incertidumbre de precios y cantidades que llegan de producto estadounidense que hoy es de 50 por ciento, lo que los hace que se queden con mucho inventario y eso “nos ha pegado” al sector.

“De pavo fresco nosotros manejamos muy poco, pero la variable es la fecha del sacrificio, nuestros ciclos  empiezan en abril para en diciembre entregar el producto”.

Añadió que el pavo americano, al ser más grande su producción, tienen un gran volumen y los que les sobran y que ellos mismos no consumen, lo guardan y no todos los años lo pueden desplazar y es cuando nos comienza a llegar al territorio nacional pavo barato pero ya tienen hasta dos años de congelación lo que afecta la calidad del producto y no es de primera.

Calidad mexicana

Marco Parsons mencionó que quieren seguir impulsando la calidad del producto nacional, apostando a las empresas mexicanas, a la economía nacional y que vean que no sólo por ser más barato el pavo es mejor y puede resultar contraproducente, y llama al consumidor a  preferir lo mexicano que da una mayor calidad.

“Estamos  un poco nerviosos  porque esta el tema del dólar y el año que entra sabemos que nos va afectar de cierta forma porque la mayoría de los insumos, las materias primas que usamos nosotros nos las cotizan en dólares, entonces ¿qué tanto nos va a pegar?, apenas estamos trabajando con los proveedores para que el golpe no sea tan fuerte. La situación de Estados Unidos hay que ver qué tanto afectan las decisiones del nuevo presidente”, declaró.

El representante de una industria que genera 21 mil empleos directos e indirectos en Chihuahua, Yucatán, Estado de México, Puebla, Tabasco, Chiapas, Guerrero, Veracruz e Hidalgo precisó que la pasta de soya es el insumo que ha registrado una mayor variación.

Se trata, dijo, de una industria que se mantiene viva pero que busca “un apoyo del Gobierno Federal” en materia de granos  a precios más económicos para bajar los costos de producción y les ayude en su lucha por mantenerse aunque con crecimientos pequeños.

Mencionó que 75 por ciento de sus costos es en alimento, y mientras se mantenga un grano a buen precio y la pasta de soya no tenga tantas altas y bajas serviría para  que hagan frente a las alzas de diésel, la electricidad  y otros insumos que día a día se incrementan.

Sobre sus expectativas para 2017, insistió en que la cancelación o modificación al TLC podría ayudarles ya que no sólo no pueden exportar pavos hacia Estados Unidos pero sin  ser “el patio trasero”donde  los productores de esa nación envían lo que allá no quieren .

“Va a ser un año complicado, traemos ya la previsión de un crecimiento mayor al uno por ciento, estamos esperando ver cómo cierra el pavo internacional porque si baja más, aunque se mantenga el tipo de cambio nos va a pegar”.

Por lo pronto,  desde Chihuahua y con una temperatura de tres grados centígrados, mencionó que  esperan una derrama de 500 millones de pesos.