Morena se impone y el Senado aprueba la Ley de Austeridad Republicana

En una sesión que concluyó a las 6:50 horas de la mañana de este martes, el pleno del Senado aprobó con 74 votos en pro, cero en contra y 29 abstenciones la Ley de Austeridad Republicana, que pone límites al gasto y determina que los ahorros que se obtengan se destinarán a los programas del Plan Nacional de Desarrollo o al destino que por decreto determine el Ejecutivo Federal.

Con esta ley se prohíbe y se cancela cualquier tipo de pensión que se creó ex profeso para beneficio de los expresidentes de la República.

Se coloca un “candado” para evitar el conflicto de interés, así cualquier funcionario que se separe de su cargo deberá esperar hasta 10 años para trabajar en empresas privadas que haya supervisado, regulado o de las cuales obtuvo información mientras ejerció su cargo.

En un debate que se prolongó por casi 5 horas, la oposición lamentó que por revancha de Morena se desconocieron los acuerdos y se nulificaron las 26 modificaciones hechas a la minuta que remitió la Cámara de Diputados el 30 de abril pasado y se volviera al documento original que violenta al menos 11 artículos de la Constitución, entre ellos, el 5º que prohíbe a servidores públicos contratarse en la iniciativa privada.

Minerva Hernández, senadora del PAN y secretaria de la Comisión de Hacienda, reprobó que se le diera el aval a una ley que tiene incluso errores de ortografía, que trastoca la división de poderes, la autonomía de los entes autónomos y que se aplicó a “machete de carnicero”, cuando lo que se requería era de bisturí para hacerle operante.

“En su afán de darle gusto al presidente, los senadores están mando al diablo a las instituciones, pues hicieron a un lado la técnica jurídica la práctica parlamentaria. Estas acciones están regresando al México del autoritarismo presidencial por la vía de la voluntad de los legisladores del grupo mayoritario, por quedar bien con López Obrador y cumplir sus caprichos. ¡Cómo no señor presidente, faltaba más señor presidente. Me canso, ganso! Sería inaudito que esta soberanía apruebe un dictamen que hasta errores ortográficos y de sintaxis contiene”.

La exsubsecretaria de Hacienda, Vanessa Rubio, cuestionó a los senadores de Morena si tendrán la conciencia tranquila, al saber que por la prisa y las órdenes superiores lo que pudo ser una buena normatividad, quedó en una ley impugnable porque viola la Constitución, diversos ordenamientos y derechos humanos.

“Hay que hacer las cosas bien, para no regarla, si queremos austeridad pero no mal y a la mala. Por las prisas y la imposición se sacrificó un acuerdo con toda la oposición. ¿Saben que estamos aprobando hoy?, una austeridad con adjetivos, la austeridad es austeridad, punto. Estamos también aprobando una austeridad que viola la Constitución, que viola las leyes, que va a afectar a los 1.4 millones de servidores públicos porque no distingue ni siquiera grados de responsabilidad, los servidores públicos desempeñan su trabajo porque aman a su país y con esta ley los estamos desanimando a trabajar por México. Estuvimos a punto de aprobar una Ley de Austeridad que de a deberás serviría a México, pero ganó el estómago”.

Julen Rementeria, vicecoordinador del PAN, resaltó que esta ley revive la “partida secreta” pues da al presidente de la República discrecionalidad para decidir en qué se gastan los ahorros que se generen por esta ley.

“Es una barbaridad lo que aquí se vino a proponer. ¿Cómo puede pensarse que una persona que trabajó en el gobierno, no importa en que área, así haya sido el secretario de Hacienda, diez años se le impida?, y no estoy a favor de los privilegios, simplemente un poco a favor de la razón. Esta propuesta, por ser lo menos, es prácticamente irracional”.

El perredista Antonio García Conejo, criticó que el Senado apruebe leyes a modo del Ejecutivo Federal, pese a los errores de técnica legislativa y de legalidad.
Deploró que la secretaria de la Función Pública, Irma Eréndira Sandoval, echó atrás los consensos y le dio “linea” a los senadores de Morena de lo que debían votar.

“Esta ley no cumple las promesas de campaña del actual Ejecutivo Federal. No combate de forma responsable y eficiente la corrupción ni propone una estrategia jurídica que inhiba y combata las acciones que dañan al patrimonio de las y los mexicanos. Bienvenida la austeridad, en todo gasto superfluo, pero no en lo que atenta contra programas vitales como es salud pública, atención de niños con cáncer, apoyos para la protección a las personas en estado de necesidad. La visita de la secretaria de la Función Pública dio muestra de la fragilidad que la tiene el grupo mayoritario ante las decisiones del Ejecutivo, es necesario generar verdaderos contrapesos, así como disminuir las decisiones discrecionales y políticas o populistas que no se sustentan con evidencia o análisis de sus impactos”

La ley de Austeridad aplicará a todas las dependencias, entidades, organismos y demás entes que integran la Administración Pública Federal, los poderes Legislativo y Judicial, las empresas productivas del Estado y sus empresas subsidiarias, así como los órganos constitucionales autónomos.

Esta ley deberá de abstenerse de afectar negativamente los derechos sociales de los mexicanos previstos en la Constitución Política y tratados internacionales de los que México es parte.

Se prohíbe la integración de fideicomisos, fondos, mandatos o análogos públicos o privados, ni hacer aportaciones o transferencias, como la compra y venta de vehículos de lujo, las contrataciones de seguros de ahorro en beneficio de los servidores públicos.

Los servidores públicos se sujetarán a un comportamiento austero y probo, así como a la remuneración adecuada y proporcional que conforme a sus responsabilidades se determinen en los presupuestos de egresos.