No descarta gobierno recurrir a deuda pública, pero sería como último recurso: Dolores Padierna

Para hacer frente a la emergencia sanitaria que enfrenta el país, el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador no descarta recurrir a la deuda pública, pero como último recurso, ya que primero deben agotarse otras posibilidades, como cuantificar las acciones que aún falta realizar e identificar otras fuentes de financiamiento disponibles.

Lo anterior lo informó la vicepresidenta de la Cámara de Diputados, Dolores Padierna Luna, quien indicó que en situaciones de emergencia económica, el endeudamiento es una opción que utilizan casi todos los países.
“La emergencia sanitaria que inició en febrero ya ha tenido un impacto en la economía y por supuesto en las finanzas públicas. Los nuevos pronósticos estiman una caída de los ingresos y para atender la emergencia, el Gobierno federal requerirá de recursos adicionales a los aprobados y se tendrá que recurrir a fuentes de financiamiento complementarias”, detalló.
Manifestó, sin embargo, que no todos los paìses tienen la misma capacidad para contratar deuda en condiciones aceptables y sostenibles, ya que implica necesariamente un incremento futuro del costo financiero.
“La capacidad de endeudamiento de un país está determinada por múltiples factores y no necesariamente sólo por el tamaño de la deuda”, explicó.
Recordó que durante los primeros años de la administración pasada, la deuda pública se incrementó de manera importante al pasar de 33.8 por ciento del PIB en 2012 al 48.2 por ciento en 2016.
Padierna Luna dijo que a partir de 2017, se modificó la política de endeudamiento y se logró disminuir a 46.1 por ciento. Agregó que durante el primer año de la actual administración continuó la política de no incrementar la deuda y se redujo a 45.5 por ciento.
La diputada de Morena señaló que el incremento de la deuda trajo como consecuencia que su costo financiero pasara de 1.9 a 2.7 por ciento del PIB entre 2012 y 2019 y se tuviera que destinar en 2019 el 12.4 por ciento de los ingresos presupuestales, más del 8.7 por ciento que se destinaron en 2012.
Expuso que en el paquete fiscal de 2020 se consideró un escenario de disminución paulatina de la deuda hasta llegar al 43.9 por ciento en 2024, con lo que se reduciría su costo a 2.6 por ciento del PIB y al 12.0 por ciento de los ingresos.
“El costo de la emergencia, que aunque no está cuantificado, seguramente implicará gastos adicionales derivados de las medidas que ya anunció el Gobierno federal, dentro de las que destacan mayores recursos para el sector salud , el reforzamiento de los programas sociales para apoyar a la población más vulnerable y el financiamiento de 2 millones de créditos a pequeñas empresas y personas”, concluyo Padierna Luna.