Los drones nos vigilan

 

Los vehículos no tripulados desempeñan un papel importante en diversas áreas de la vida cotidiana


Los drones nos vigilan

Los drones son dispositivos tecnológicos que vuelan de manera autónoma y pueden realizar tareas específicas, que por sus diseños pueden estar asociados a: combatir incendios, tejer líneas de vida en caso de algún desastre natural, transportar medicamentos o sangre a zonas de difícil acceso; hacer agricultura de precisión, la conservación de animales, mapeo de grandes terrenos en poco tiempo, entre otras actividades.

“Un dron puede ser cualquier tipo de robot de tierra o aéreo que realice alguna tarea con supervisión humana pero que toma cierto grado de decisiones”, explicó Alexandro López González, integrante del grupo de robótica móvil de la Universidad Iberoamericana (UIA).

La palabra es una adaptación al español del sustantivo inglés drone que significa “zángano”; insecto que produce un zumbido particular similar al de los aparatos voladores.

Para Arturo Zepeda Rojas, integrante del doctorado en antropología de la UIA, su origen está ligado al desarrollo tecnológico en el ámbito bélico, fundamentalmente después de la Segunda Guerra Mundial, “la industria de los drones de corte civil o comercial, es relativamente reciente, y la podemos situar en los primeros años del siglo XXI”.

Este tipo de tecnología se ha concentrado principalmente en la industria de la fotografía y video, además está ligado con la industria de la comunicación e información, al ser usados para llevar acceso a internet a zonas donde sería muy difícil acceder; inclusive “algunas compañías de comida rápida y de comercio electrónico han expresado su interés por entregar sus productos por medio de los drones”.

Drones en territorio mexicano

En la actualidad, la Universidad Iberoamericana trabaja con la Comisión Nacional de Seguridad en un proyecto de vehículos no tripulados que permitan asegurar sus elementos antes de entrar a una posible zona de riesgo o peligro.

La Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), estableció el 25 abril del 2015 una circular obligatoria con los Requerimientos para Operar un Sistema de Aeronave Pilotada a Distancia (RPAS), que contiene recomendaciones para el diseño y manejo de las aeronaves, incluyendo el establecimiento de reglas, requisitos y permisos que deben acatar los usuarios que vuelan drones en nuestro país.

“Personas involucradas en el mundo de los drones han señalado que esta circular es confusa e insuficiente, por lo que se deberá trabajar para diseñar una estructura institucional que garantice el control y seguimiento de drones, que establezca lineamientos claros y sencillos respecto a sus uso y operación”.

Por sus características se pueden dividir en drones de ala rotatoria, que son los más comunes y cuentan con motores eléctricos que mueven cierto número de hélices, y drones de ala fija, parecidos a los cohetes y aviones comerciales; aunque también existen algunos que combinan rotores con ala fija, pero no son tan ordinarios.

Costos

Los costos para adquirirlos pueden variar según la calidad de sus componentes, aunque los precios oscilan desde los dos mil hasta los 50 mil pesos, según lo que se desee invertir.

En el país se pueden conseguir a través del comercio electrónico, lugares físicos como: servicios departamentales, jugueterías y tiendas de electrónica.

Los tiempos de vuelo varían según su tamaño, expertos coinciden en que los pequeños pueden volar entre 9 y 18 minutos, mientras que los más grandes llegan hasta los 50, dependiendo del tipo y uso de la batería. Por lo que enfrentan una restricción en su uso, debido a que en la actualidad no se cuenta con tecnología adecuada o avanzada para su batería.

“Si necesitas mucho tiempo de vuelo, necesitas baterías más grades, y para cargar baterías más grandes necesita un dron más grande, por lo que empiezas a jugar con la relación peso potencia. Las baterías ahora nos limitan mucho”, subrayó el especialista en tecnología, Alexandro López González.

Ambos especialistas coinciden en que los drones son más que una moda tecnológica. Los dispositivos son capaces de convertirse en “potentes herramientas de trabajo” que cambiarán la dinámica empresarial y comercial en muchos sentidos, sobre todo en tareas que hasta hace algunos años se hacían de forma tradicional.

No obstante, Zepeda Rojas advirtió que “haríamos mal en confiar demasiado en que los drones vendrán a mejorar muchas prácticas, solucionar problemas humanos, o sustituir a los hombres por máquinas”.

Por su popularidad, en los últimos años, se han creado grupos sociales en todo el mundo que dedican su tiempo libre al armado y vuelo de drones, incluso se han conformado competencias de vuelo para comparar velocidades entre uno y otro, conocidas como “Drone Racing”.

En México, diversas universidades ofrecen carreras de ingeniería y electrónica orientadas al desarrollo e innovación de esta tecnología parausos sociales y comerciales. Particularmente la iniciativa “Drones México”, la cual busca consolidarse como una comunidad de droneros entusiastas con distintos enfoques, actividades y perfiles.

Dato histórico

El inventor Nikola Tesla desde 1898 patentó un mecanismo similar a los drones que conocemos hoy en día, bajo el nombre de “Método y aparatos de control para el mecanismo de buques o vehículos en movimiento”, el cual podría controlarse a través de ondas, impulsos o radiaciones que se enviaran a través de tierra, agua o aire.