México, con protocolo aéreo por volcanes

 

El país cuenta con altos estándares de seguridad aérea para responder a contingencias causadas por erupciones: Canaero


REDACCIÓN

El volcán Popocatépetl se encuentra bajo monitoreo de las autoridades luego que desde hace dos
semanas se intensificara su actividad que provocó Alerta Amarilla, y Protección Civil advirtió que
podrían continuar con la emisión de ceniza y material incandescente.

Ante esto, México cuenta con altos estándares de seguridad aérea para responder a contingencias causadas por erupciones volcánicas, así lo informó la Cámara Nacional de Aerotransportes (Canaero).

El organismo señaló que desde hace más de dos décadas en conjunto con la Dirección General de
Aeronáutica Civil (DGAC) y otros actores del sector aéreo, se estableció la emisión en el país de
Circulares Informativas donde se detallan los procedimientos y métodos recomendados a seguir
en vuelo y en tierra cuando exista actividad volcánica en el espacio aéreo mexicano.

Este documento, explicó, resultó de la inquietud de la industria aérea por reforzar los protocolos que
brinden seguridad a las operaciones y por ende a los pasajeros, así como del incremento que se
identificó de la actividad del volcán de Fuego, en Colima y el Popocatépetl, ubicados entre Puebla,
Morelos y el Estado de México desde 1992.

Además, la circular considera que México cuenta con volcanes localizados en la región circumpacífica (zona de gran actividad sísmica), por lo cual se reconoce no está exento de sufrir alguna contingencia por erupción.

La organización explicó que durante 2014 se actualizaron y establecieron las disposiciones, en
conjunto con la industria aeronáutica y organismos vulcanológicos, adicional a la creación del “Grupo de Tareas sobre Contingencia de Cenizas Volcánicas”.

Entre las tareas de este grupo, está intercambiar información en tiempo entre las distintas dependencias áreas y de seguridad de erupción o de ceniza volcánica que ponga en peligro la
prestación de servicios aéreos en las zonas circunvecinas a la actividad del volcán.

La Canaero precisó que entre los riesgos por exhalaciones y erupciones volcánicas, así como nubes de cenizas está el que pueden ocasionar severas afectaciones a las aeronaves y en consecuencia a las operaciones de tránsito aéreo, conllevando así a situaciones que amenacen la seguridad de las operaciones en vuelo o en tierra.

Entre volcanes y montañas

La capital mexicana se encuentra ubicada en un valle rodeado de montañas elevadas.
Por el suroeste se encuentran dos volcanes, el Popocatépetl (activo), que alcanza una altitud de
cinco mil 400 metros sobre el nivel medio del mar, y el Iztaccíhuatl (inactivo), con una cima a cinco mil 230 metros.

En el suroeste está la Sierra de Ajusco- Chichinauhtzin, en la cual se ubica el volcán Xitle (inactivo, tres mil 100 metros) que tiene cimas montañosas de hasta cuatro mil metros.

Expertos en aviación revelan que las montañas y volcanes dificultan los accesos aéreos a la Ciudad
de México. Advierten que entre 60 y 70 por ciento son zonas montañosas elevadas a su alrededor.

La orografía del Aeropuerto capitalino -inaugurado en 1963- opera con un solo corredor de
aproximación, es decir, la ruta que siguen los aviones para descender a la ciudad.