Las personas que han asistido a partidos de beisbol, saben que hay una advertencia clara desde la hora en la que se adquieren los boletos: no pierda de vista la pelota.

Y aunque para algunos un batazo de faul se convierte en la posibilidad de conseguir un souvenir del parque de pelota, para otros puede significar el recibir un golpe tan fuerte que incluso puede provocar la muerte.

Una mujer falleció como consecuencia del impacto de un pelotazo de foul durante un juego en el Dodger Stadium en agosto pasado, según el reporte del forense que fue obtenido por ESPN.

De acuerdo con información de AP, Linda Goldbloom celebraba que cumplía 79 años y el 59 aniversario de matrimonio en un partido celebrado el 29 de agosto de año pasado.

Durante el partido, un batazo de parte de jugador de los Padres de San Diego provocó que la pelota traspasara el área que cubría la malla protectora, impactando a Goldbloom en la cabeza.

La mujer murió cuatro días después en el hospital L.A. County-USC Medical Center.

El reporte del forense del condado de Los Ángeles afirma que el trauma causado por la pelota bateada provocó el fallecimiento.

Los Dodgers indicaron en un comunicado que estaban “profundamente consternados” por el fallecimiento de Linda y que “el asunto fue resuelto entre los Dodgers y la familia Goldbloom”.

Por primera vez, en la pasada temporada, todos los 30 equipos de las Grandes Ligas debieron expandir las mallas protectoras, alcanzando al menos los extremos de cada una de sus cuevas.

Los pedidos a favor de la medida se acrecentaron en 2017 tras una serie de incidentes en que espectadores resultaron heridos.

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