¿Vikingos o jugadores?

Hace algunos años llegó a nuestro país una serie televisiva de éxito mundial protagonizada por vikingos, antiguos pobladores de Escandinavia, famosos por sus sangrientas tradiciones y sus grandes dotes para la guerra, basada en la vida del legendario rey nórdico Ragnarr Loobrók Sigurdsson, la serie nos entrega una romántica estampa de un pueblo apasionado y con un valor inconmensurable.

Ahora bien, Islandia, uno de los países que conforman la antigua Escandinavia junto con Noruega, Dinamarca, Finlandia y Suecia es referido constantemente en dicho programa; allí los elementos ficticios se entremezclan con el rigor de la historia, sin embargo, una cosa sí es segura: el que los islandeses, herederos directos del valor vikingo, han dado muestras de coraje y arrojo en infinidad de momentos históricos, y hoy nuevamente parecen retar al mundo con su imponente alarido de batalla, pero en un escenario infinitamente menos dramático que el de la guerra, el del futbol.

De la guerra al futbol 

La selección de Islandia que participa en el Eurocopa de Francia 2016 no sólo evoca el carácter de este antiguo pueblo septentrional sino que, intencionadamente, revive algunos elementos simbólicos de los vikingos que alguna vez fueron llamados el azote de Europa; desde su impresionante grito de guerra que evoca el ritmo de remo en un Drakkar, barco vikingo, su formación previa a los juegos y la fortaleza física (a menudo demasiado intensa) con la que disputan cada balón; cada una de estas características parece recordar una horda de guerreros nórdicos dispuesta a todo con tal de obtener la victoria. Juegan con el valor y la fiereza propias de los vikingos, no sólo no se achican frente a otras selecciones, sino que les pelean al tú por tú en cualquier sentido y bajo cualquier circunstancia, algo que ha quedado de manifiesto en cada uno de sus partidos. Con fuerza y determinación le sacaron el empate al Portugal de Cristiano Ronaldo en la primera fecha por 1-1, su primer punto en una Euro; volvieron a empatar frente a Hungría por el mismo marcador y dieron un autoritario golpe de hacha contra Austria, a la que derrotaron 2-1, lo cual les alcanzó para clasificarse como segundos de grupo.

Coincidencias históricas 

En los octavos de final, el mayor logro en futbol para Islandia, volvieron a mostrar la determinación de sus antepasados y derrotaron a Inglaterra por marcador de 1-2, la mayor sorpresa hasta ahora en la Eurocopa; curiosamente, si nos remontamos en la historia, la primera nación que fue conquistada por los vikingos de Escandinavia fue justamente Inglaterra, allá por el siglo VIII d.C. y, de hecho, fueron los ingleses (más específicamente mercios y northumbrios) los que se encargaron de bautizar a los saqueadores llegados de ultramar como “wicingas”, que en dialecto ánglico significa “ladrones de mar”, de donde derivó el término vikingo.

Más llamativo aún resulta que los wicingas, casi inmediatamente después de tomar toda Inglaterra, se hicieron del control de Francia a finales del siglo VIII; de hecho Normandía en la costa francesa actual recibe su nombre de los visitantes septentrionales que la conquistaron (nord-norte, man-hombre e ia-sufijo de lugar, hombres venidos del norte); lo curioso es que el rival de Islandia en la ronda de cuartos de final es justamente el país galo, por lo que viene una pregunta a la mente: ¿En la Euro, sufrirán el mismo destino que la Gran Bretaña a manos de los vikingos?

Los vikingos de Islandia Retomando la serie de Vikingos, existen varios personajes que bien podrían tener su equivalente en el actual equipo de Islandia, comenzando por el corazón del equipo el “todoterreno” Aron Gunnarsson, quien lo mismo puede rematar un esférico en el área contraria que salvar un gol con una barrida en su propia meta; un incansable vikingo en toda regla que con su barba y tatuajes y, sobre todo, con su entrega, intimida a más de un rival, bien podría ser el mismísimo Ragnarr
Loobrók.

Después está uno de los futbolistas más veloces y poderosos de cuantos se hayan visto en la Euro, Birkir Bjarnason, que con su prodigiosa zancada es capaz de llegar a balones imposibles y convertirlos en jugadas de peligro, por su destreza y velocidad podría encarnar a Rollo Loobrok, el hermano de Ragnar.

Inteligente y astuto a la hora de moverse en el área contraria, además de su capacidad para generarse, por sí mismo, oportunidades para crear peligro y poseedor de un remate letal, Ragnar Sigurdsson, podría ser perfectamente Floki, el hombre de confianza de los Loobrok.

Finalmente el veterano y héroe de mil batallas con la selección de Islandia, Eidur Gudjohnsen, cuya experiencia en la selección es su mayor arma, tendría que encarnar al rey Hodrik, un hombre respetado por su pueblo, pero consciente de que su tiempo se acabó.