Lluvias, ayudaron a recargar acuíferos

 

 ALMA RODRÍGUEZ  Pese a que la temporada de lluvias ya ha pasado, la Comisión del Agua del Estado de México (CAEM) informó que en comparación con el año 2017, en el año que recién terminó se tuvo un volumen de precipitación mayor en un 24 por ciento y se registraron 105 eventos de lluvia, es […]


 ALMA RODRÍGUEZ 

Pese a que la temporada de lluvias ya ha pasado, la Comisión del Agua del Estado de México (CAEM) informó que en comparación con el año 2017, en el año que recién terminó se tuvo un volumen de precipitación mayor en un 24 por ciento y se registraron 105 eventos de lluvia, es decir, 33 más que los registrados durante todo el 2017. 

“Esto también nos ayudó a la recarga de los mantos acuíferos, es decir, a que la CONAGUA tenga las presas que abastecen los sistemas hídricos en orden de un 6 por ciento superior, histórico, lo que nos garantiza tener agua en época de estiaje para consumo humano en por lo menos 3 años”, explicó Alfredo Pérez Guzmán, responsable de la vocalía ejecutiva de la Comisión del Agua del Estado de México (CAEM). 

Infraestructura hidráulica sólida 

Además, informó que pese a que hubo más lluvias, se atendieron a menos ciudadanos ya que en 2017 se dio atención a 16 mil personas de 19 municipios, mientras que en 2018 a cerca de 8 mil habitantes de 31 demarcaciones. 

“Ello significa que nuestra infraestructura hidráulica estuvo mucho más limpia y más preparada para afrontar la temporada de lluvias. Tuvimos más volumen de agua y más municipios atendidos, pero las consecuencias fueron menores”, sostuvo Pérez Guzmán. 

Actualmente, dijo, se tienen identificados 16 puntos de la geografía mexiquense con alto riesgo de inundaciones, puntos en los que Grupo Tláloc se encuentra en alerta para auxiliarlos. Algunos de esos puntos se encuentran en los municipios de Cuautitlán Izcalli, Chicoloapan, Naucalpan y San Mateo Atenco, entre otros puntos. 

Sucesos en 2018 por lluvias 

Haciendo un balance de los hechos con mayor afectación que se tuvieron en 2018, recordó la fisura del Río Lerma que causó daños en cinco barrios de San Mateo Atenco, lo que les llevó a realizar 60 horas de arduo trabajo para la reparación completa de la ruptura. 

Trabajo que les requirió un esfuerzo de 12 días, contra los 3 o 6 meses necesarios en años pasados. 

Recordó el desbordamiento en la Presa “El Ángulo” en Cuautitlán Izcalli; en Nezahualcóyotl y los problemas de inundaciones donde la infraestructura no ha sido renovada en 60 años; Chimalhuacán y el desgajamiento de cerros; así como desbordamientos de ríos en Chicoloapan y Naucalpan.