El Mosh regresa a la cárcel, ahora en Michoacán

 

Su esposa argumenta que fue detenido arbitrariamente


Luego de que Alejandro “N”, mejor conocido como El Mosh, fuera detenido en Michoacán por supuestamente participar en la toma de instalaciones de la Secretaría de Educación del Estado, fue trasladado al Centro de Reinserción Social “David Franco Rodríguez”.

Además de “El Mosh”, cuatro personas más estarán recluidos en el penal de “Mil Cumbres”, en Michoacán, donde un juez de control dictará sentencia y resolverá si los cinco implicados son culpables de los delitos de Allanamiento de Morada y Daño en las Cosas doloso.

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En el operativo para recuperar el edificio de la SEE fueron detenidas ocho personas más, sin embargo, cuatro de ellas fueron liberadas la tarde de este jueves tras comprobar que eran parte del personal de seguridad que resguardaba las instalaciones; las restantes están a la espera de que se resuelva su situación jurídica.

El gobierno estatal denunció que las afectaciones a las instalaciones de la Secretaría de Educación de Michoacán equivalen a 664 mil 500 pesos, ya que fueron dañados varios equipos de cómputo. Además, hubo daños a estructuras y se rompieron candados, cadenas, cerraduras, puertas y cristales.

ESPOSA DE “EL MOSH” LO DEFIENDE

A las afueras de la Procuraduría General de Justicia del Estado llegó Ana Sánchez, esposa de Echavarría, y afirmó ante medios que su marido fue detenido injustamente, ya que él no se encontraba dentro de la SEE.

Según sus palabras, “El Mosh” fue sacado de su vehículo cuando se encontraba estacionado a tres cuadras de donde se realizó el operativo; él estaba esperando a una auxiliar administrativa para que le entregara un par de cheques que le adeudaban por su trabajo como profesor.

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La primera vez que Alejandro Echavarría Zarco estuvo tras las rejas fue en el año 2000, después de un operativo de la PFP para retomar las instalaciones de la UNAM y terminar con 10 meses de paro.

Al salir del reclusorio, la UNAM le otorgó la medalla Gabino Barreda, por ser uno de los estudiantes con mejor promedio de su generación; dicho reconocimiento fue rechazado por “El Mosh”, argumentando que los aceptaría hasta que la UNAM tuviera un rector que defienda la autonomía.

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GG