Foto de Valeria y su padre muestra la cruda realidad migratoria

 

“Me dio una enorme tristeza”, exclama el fotoperiodista Abraham Pineda-Jácome Por Gerardo Avendaño Matamoros, Tamps., 26 Jun (Notimex).- La fotografía de Valeria aferrada a su padre en el río Bravo es cruda y triste porque demuestra las consecuencias de las políticas migratorias de México y Estados Unidos, afirmó el fotoperiodista Abraham Pineda-Jácome, autor de la […]


“Me dio una enorme tristeza”, exclama el fotoperiodista Abraham Pineda-Jácome

Por Gerardo Avendaño

Matamoros, Tamps., 26 Jun (Notimex).- La fotografía de Valeria aferrada a su padre en el río Bravo es cruda y triste porque demuestra las consecuencias de las políticas migratorias de México y Estados Unidos, afirmó el fotoperiodista Abraham Pineda-Jácome, autor de la imagen que conmocionó al mundo.

En entrevista, declaró que por inercia tomó la fotografía de Óscar Alberto Martínez Ramírez y su hija Angie Valeria envuelta en su playera, pero instantes después reflexionó de la magnitud del hecho.

“En ese momento no pensaba en nada, sólo tomar las imágenes como parte del trabajo que hacemos, ya después sí me puse a pensar ¿cómo fue que se metió a la niña en la camisa para tratar de salir? La niña tiene prácticamente su brazo sobre el cuello de su padre, como si estuviera abrazándolo. Es muy triste”, señaló.

Pineda-Jácome refirió que en esta ocasión tuvo el material correcto para difundir un mensaje y demostrar lo que los migrantes están dispuestos a hacer y perder por perseguir sus sueños.

“Esta fotografía no me alegra tanto que haya sucedido así, pero por eso deben de cambiar las cosas y ese debe ser nuestro mensaje, de un cambio”, dijo.

Abraham relató que desde el domingo 23 cuando supo que al migrante salvadoreño y su hija los arrastró la corriente, siguió el caso y con un compañero periodista atendieron el operativo de rescate implementado por la Policía Estatal y Protección Civil, el cual no pudo seguir por falta de alumbrado al caer la noche.

A las 09:00 horas del lunes llegó hasta el río para reportear la búsqueda y a las 10:00 horas, personal de Protección Civil a bordo de una lancha localizaron a Valeria y su padre flotando en el caudal del río, los amarraron y arrastraron a la orilla donde Pineda-Jácome llegó con su cámara para capturar el instante.

“Llegué y ahí estaban los cuerpos de Óscar Martínez y Valeria, empecé a tomar fotografías, por pura inercia y a los minutos llegaron las autoridades y acordonaron la zona, ahí es cuando me pongo a reflexionar sobre la magnitud de la situación”, expresó.

Los cuerpos se recuperaron a la altura de las calles Matamoros y Tamaulipas, a un kilómetro del Puente Nuevo Internacional; sólo tres medios de comunicación tomaron la imagen antes de que elementos de la Marina y peritos acordonaran la zona.

El fotógrafo continuó documentando el suceso, incluso capturó el instante cuando sacaron del agua el cuerpo inerte de la niña Angie Valeria, pero la escena era tan grotesca que Abraham decidió no difundirla y se la guardará para el baúl de los recuerdos.

“A la niña la sacaron, pesqué la imagen, traía su cuerpecito hinchado, los ojos cerrados. Esta imagen es más cruda, pero no pude enviarla a la agencia internacional”, aseveró.

Pineda-Jácome contó que en ese momento pensó en sus hijos, en familiares cercanos.

“Empecé a ver detenidamente las imágenes y sí me causó mucho impacto, porque también soy padre de familia, te pones a pensar en el lado humano, dices, me pudo pasar a mí o a alguien cercano”, compartió.

Alrededor de las 12:00 horas llegó la madre de Valeria, Tania Vanessa Ávalos, quien se resguardaba en la casa del migrante, y exigió que le entregaran el cuerpo de su esposo y su hija, también gritó a la prensa que no le tomaran fotografías, ni que la filmaran.

“Yo estuve a punto de tomarle una fotografía, pero cuando vi cómo estaba de alterada me abstuve y no tengo esa imagen. Cuando ella llegó los cuerpos ya estaban en bolsas para llevarlos hasta el Semefo y así, como llegó a los 20 minutos cuando sacaron los cuerpos, se fue”, expresó Pineda-Jácome.

Después Abraham regresó a su redacción a examinar el material, se conmocionó por la cruda realidad sobre los migrantes, luego las envió a medios locales y a la agencia EFE, con lo que la fotografía se difundió de forma masiva y provocó reacciones tanto a nivel nacional como internacional.

En redes sociales incluso la compararon con la fotografía tomada en 2015 de un niño migrante sirio, muerto en una playa. Abraham relató que en ese entonces era editor en un medio local y le impactó la noticia, cuatro años más tarde le correspondió documentar un hecho similar pero esta vez en territorio nacional.

“Yo creo que cada vez se vuelve más complejo el fenómeno migratorio, cada vez son menos oportunidades que hay para los migrantes, en cierta manera se puede percibir un retroceso para tratar de componer la situación. Esto que sucedió es el resultado del endurecimiento de las políticas de Estados Unidos y de las que ahora ha tomado México”, manifestó.

Abraham Pineda-Jácome señaló que la fotografía de Valeria aferrada a su padre será un logro profesional, pero aseguró que continuará con su convicción de salir todos los días para conseguir buenas historias y fotografías que impacten y generen cambios positivos en la sociedad.

-Fin de nota-

NTX/GAV/VGT/MIGRA16